El pico del mercado de granos parece haber terminado. Los precios en los mercados de futuros fueron hasta un 5% más bajos la semana pasada que en la última semana de noviembre. Esto tiene que ver con la toma de beneficios por parte de los inversores después de un período de fuertes aumentos de precios. Además, ha habido algunas lluvias muy apreciadas en el Cinturón de Cereales de EE.UU., que causaron particularmente la caída del precio del trigo en el mercado de futuros de Chicago. El 4 de diciembre, esto ascendió a -5% en comparación con el 27 de noviembre. En Francia, el trigo y la cebada sembrados en otoño entran en el invierno en condiciones excelentes, a diferencia del año pasado, en que apenas ¾ de la cosecha obtuvo el predicado «bueno a excelente».

El comercio en el mercado físico es tranquilo y estable

En el mercado físico, el comercio es tranquilo y estable, lo que no es raro en esta época del año. Una nueva caída del valor del dólar americano frente al euro y el rublo ejerce una presión adicional sobre los precios del trigo y el maíz. El rublo está en su nivel más alto frente al dólar desde septiembre. Esto mejora la competitividad americana. El pronóstico de la cosecha de trigo canadiense, que se estima en 35,2 millones de toneladas, también pesa sobre los precios del trigo. Esta sería la mayor cosecha en 7 años.

La agencia de noticias Reuters informa que China sigue revisando sus reservas de grano del gobierno por razones de seguridad. La novedad en este sentido es que no se limitan a las reservas almacenadas centralmente, sino que también -y sobre todo- quieren abordar el almacenamiento regional y local, o hacer que se aborden, para mantener el suministro nacional de alimentos bajo control. En las próximas semanas, el curso de las importaciones chinas será el centro de atención.

Ahora estamos viendo un desarrollo sorprendente en el mercado del trigo, según un informe del sitio agrícola-económico Agrimoney. Australia se dirige a una cosecha de trigo muy grande (el doble de grande que la anterior, pero por lo demás un rendimiento pequeño), pero los exportadores están abandonando, sin embargo, la venta de trigo blando a China, que es especialmente adecuada para el sector de la panadería (pastelería) que está surgiendo rápidamente en ese país. Los exportadores consideran que es demasiado arriesgado, dado el aumento de la tensión política entre los dos países. Esto es difícil para los clientes chinos, porque el tipo de trigo deseado es escaso o demasiado caro en otros lugares.