El destete de los lechones sin antibióticos es actualmente el mayor reto para producir cerdos sanos y eficientes. El principal desafío es comenzar demasiado tarde y sólo mirando el manejo del lechón destetado, se necesita un enfoque balanceado comenzando con la cerda preñada tardía para tener éxito. En este artículo se destacan los principales factores que hay que tener en cuenta para una digestión eficiente, un estado inmunitario adecuado y la gestión de los microbios cuando se producen lechones con la menor cantidad posible de antimicrobianos.

Sólo una cerda sana puede producir una gran camada de peso uniforme y buena salud. Entonces tiene que proporcionarles suficiente leche para crecer y desarrollar sistemas vitales como un sistema inmunológico maduro. Proporcionar suficiente leche es un desafío fisiológico para la cerda, ya que su leche tiene aproximadamente el doble de energía (5,3 MJ GE/kg) y grasa que la leche de vaca (2,7 MJ/kg). Por lo tanto, sin una cerda en forma no puede haber lechones sanos.

Pre-Destete

La contribución de la cerda a la salud de los lechones va más allá en el período previo al destete. El tracto gastrointestinal de los lechones sólo empieza a establecer un microbioma propio después del nacimiento. La cerda contribuye a esto de dos maneras.

1. La leche de cerda, contiene azúcares prebióticos que favorecen una rápida colonización con Lactobacillus y Bifidobacterium. A medida que el lechón y su sistema inmunológico se desarrollan, el microbioma se diversifica a partir de esto. Además, la leche es responsable de la transferencia de la inmunidad materna al lechón.
2. La colonización primaria del microbioma proviene de las secreciones de la cerda, las heces y el medio ambiente. La cerda no tiene influencia sobre qué parte de su microbiota pasa al lechón. Una cerda sana con un microbioma equilibrado puede suministrar grandes cantidades de microbiota positiva a su camada.

La cerda tiene un sistema inmunológico desarrollado, por lo que aunque parezca saludable, podría transmitir a sus lechones bacterias dañinas como la agresiva E. coli. Considerando el sistema inmunológico inmaduro de los lechones, sólo ellos pueden mostrar la enfermedad que fue transmitida por la madre.

Destete

Los lechones son destetados a edades no fisiológicamente tempranas. Dos sistemas son los más afectados, el tracto gastrointestinal y el sistema inmunológico. El tracto gastrointestinal se ve afectado por un cambio en el microbioma, daño mecánico e inflamación como reacción a las tensiones (sociales, nutricionales, de manejo) del destete.

Los efectos se ven agravados por el sistema inmunológico inmaduro que no ha desarrollado una respuesta inmunológica adaptativa completa y por lo tanto depende más de la respuesta inmunológica innata. Los lechones corren un riesgo sustancial de enfermedades y de translocación de patógenos del tracto intestinal al destete.

¿Cómo se apoya este destete?

Las prácticas difieren entre los países, pero siempre que es posible, los lechones reciben sus primeros antibióticos (Colistina, Amoxicilina, CTC, Lincomicina, Tiamulina, Tilosina) ya antes del destete en un intento de reducir los potenciales patógenos. Sin embargo, el daño al microbioma deseable hace que los lechones sean aún más susceptibles a aquellos organismos que tienen una amplia tolerancia a los antibióticos, como la Salmonella. En los EE.UU., la resistencia a los antibióticos de la Salmonella se ha reportado en niveles de hasta el 78% para los antibióticos de uso común.

Después del destete, se utilizan niveles de óxido de zinc de hasta 2800ppm para controlar la salud intestinal. Esto funciona hasta cierto punto; sin embargo, hace que la absorción de minerales cruciales como el hierro sea muy difícil para los lechones tratados.

¿Cómo podemos ayudar a la salud del lechón de manera efectiva sin recurrir a los antibióticos?

Incluso cuando es legal, la administración de antibióticos a los lechones tiene efectos secundarios negativos e incluso el óxido de zinc tiene inconvenientes (efecto de absorción de minerales). No existe una solución única para sustituir uno o dos antibióticos y el óxido de zinc por un solo componente. El alimento puede ayudar a apoyar a los lechones sin antimicrobianos de varias maneras.

1. Reduciendo la capacidad de amortiguación del alimento con bajos niveles de proteína y fuentes de calcio no amortiguadoras como el Formyl. Esto permite a los lechones digerir el alimento, para el que no están preparados fisiológicamente, debido a la falta de producción de ácido. En lechones muy jóvenes de 8 kg o menos, los ácidos libres adicionales, como el Acid Lac pueden ayudar a asegurar la digestión de las proteínas.
2. La menor cantidad posible de proteínas y nutrientes libres en el intestino posterior. La formulación del alimento puede contribuir a ello con ingredientes fácilmente digeribles, pero también utilizando multienzimas (por ejemplo, Kemzyme) para ayudar al lechón a digerir a nivel de un animal más maduro. La reducción de los nutrientes en el intestino posterior se ha relacionado con un menor riesgo de disbiosis, lo que también hace que el lechón sea más resistente.
3. Los lechones jóvenes dependen más de su respuesta inmunológica innata que los animales más viejos. Especialmente en momentos de estrés, una modulación (por ejemplo con Aleta) de esto puede ayudar a mantener su resistencia, cuando se enfrentan a patógenos potenciales.
4. Establezca y mantenga un microbioma positivo lo antes posible, así que no suministre un probiótico al destete, empiece a suministrarlo a la cerda. Clostat por ejemplo, está registrado tanto para cerdas como para lechones, para manejar el microbioma del lechón desde el nacimiento hasta después del destete.

Conclusiones

Es posible reducir el uso de antibióticos y de óxido de zinc en los lechones. Sin embargo, no hay una solución sencilla que pueda cubrir todos los riesgos para la salud de los lechones en edades de destete y pesos inferiores a 8 kg. Asegurar la acidificación del contenido del estómago, una buena digestibilidad del alimento, un sistema inmunológico preparado y la modulación del microbioma juntos, sin embargo, puede mantener la salud de los lechones.

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