Las fibras funcionales de las dietas en la nutrición previa al destete pueden alterar positivamente la salud intestinal y la función del tracto gastrointestinal (TIG).
El artículo en PigProgress.net aborda que existe una creciente necesidad de proporcionar a los lechones una alimentación suplementaria adecuada. Esto se debe principalmente a las camadas más grandes, que están presionando a las cerdas para producir más leche. Como resultado, ha surgido una brecha entre la cantidad de leche que las cerdas pueden producir y la cantidad de energía y proteínas que necesitan los lechones en camadas grandes.
Desarrollar el GIT en un órgano sano
Trouw Nutrition tiene como objetivo explorar más a fondo las formas de optimizar la leche y/o la alimentación suplementaria para acelerar el desarrollo del joven TIG en un órgano sano y bien maduro. Un trabajo reciente del Centro de Investigación Porcina de la empresa en los Países Bajos ha demostrado que las fibras seleccionadas son importantes componentes de la dieta en este sentido. En un estudio, por ejemplo, se añadió brean de trigo (fibra) al suplemento de leche y a los alimentos secos para ganado (en sustitución del almidón de maíz). Los resultados se compararon con un grupo convencional de bajo contenido de fibra (control). Todas las cerdas se manejaron de la misma manera, y el destete tuvo lugar a las 3,5 semanas.
En general, el tratamiento con alto contenido de fibra dio lugar a una mejora numérica en la ingesta de materia seca del alimento suplementario (817 g en comparación con 450 g), mientras que el peso del destete no se vio afectado de manera significativa. Sin embargo, las diferencias más notables se encontraron en las dimensiones de los intestinos delgado y grueso. Por ejemplo, en el tratamiento con alto contenido de fibra, el intestino delgado tendía a ser un 18% más largo y el intestino grueso un 25% más pesado. Aunque los datos sobre la función de barrera intestinal no fueron concluyentes, en general, los datos están en consonancia con un sistema intestinal más maduro en el momento del destete y es concebible que esto dé lugar a menos casos de trastornos digestivos en las fases de producción posteriores al destete.
El artículo completo puede leerse en PigProgress.net