El aire es el factor más importante que afecta a la fermentación del ensilado. Ejerce su influencia a través de las actividades de microorganismos aeróbicos como bacterias, levaduras y hongos aeróbicos. Estos microorganismos actúan conjuntamente en la disminución del valor nutritivo del ensilado al alterar sus características químicas y físicas.
Las principales bacterias implicadas en el deterioro aeróbico son especies de bacterias lácticas homofermentativas y heterofermentativas. Éstas son capaces de realizar la fermentación aeróbica de la siguiente manera
Además de las bacterias, algunos miembros del género de las levaduras pueden participar en el proceso de deterioro aeróbico. Entre ellos se encuentran los que utilizan ácidos, como Candida y Hansenula polymorpha, y los que utilizan azúcares, como Torulopsis glabrata. El efecto de las levaduras se hace evidente cuando su población supera los 105/g de cultivo fresco. Sin embargo, se comprobó que el deterioro aeróbico también puede producirse cuando el número es inferior a 105, lo que sugiere que la población de la levadura no es un factor importante.
Los hongos filamentosos también pueden desempeñar un papel en el deterioro aeróbico, especialmente en el ensilado de hierba.
Los microorganismos aerobios del ensilado no son invasores
Los microorganismos aeróbicos son endógenos al ensilado y no son invasores aéreos. Se llegó a esta conclusión tras la exposición de los ensilados al aire esterilizado y al aire no esterilizado. Los ensilados de ambos tratamientos sufrieron un deterioro aeróbico.
Durante el deterioro aeróbico, los azúcares fermentables, las proteínas, los aminoácidos, el ácido láctico y el ácido acético son utilizados por estos microorganismos como fuente de energía. La asimilación del ácido láctico y del ácido acético da lugar a un aumento del pH. El aumento del pH también puede deberse a la desaminación de los aminoácidos por parte de los microorganismos, lo que contribuye aún más al aumento del pH mediante la liberación de amoníaco. Como resultado del aumento del pH del ensilaje, a menudo se produce un aumento de la temperatura de la masa ensilada, especialmente en el caso de cultivos ensilados con alto contenido en materia seca (MS), debido a la falta de humedad que puede disipar el calor. El aumento de la temperatura y del pH del ensilaje proporciona condiciones favorables para el crecimiento y desarrollo de mohos. La formación de estructuras proteicas complejas (desnaturalización de las proteínas) también puede producirse bajo un pH y una temperatura elevados. Como se ha mencionado anteriormente, existe una absorción continua de azúcares por parte de los microorganismos aeróbicos. Por lo tanto, se produce un agotamiento de la cantidad de sustratos necesarios para mantener el crecimiento y el desarrollo de las bacterias lácticas. Esto haría que la fermentación pasara de ser láctica a butírica, con el consiguiente mal olor del ensilado y la baja aceptabilidad del mismo por parte de los animales. También se sugiere que los microorganismos aeróbicos provocan la proliferación de coliformes, levaduras y, en etapas posteriores, de clostridios. Los clostridios conducirían sin duda a una disminución de la calidad del ensilado debido a su efecto sobre la desaminación de los aminoácidos y la disponibilidad de los azúcares fermentables.
Pérdida de nutrientes y producción animal
El deterioro aeróbico durante el almacenamiento suele ser el responsable de la mayor parte de la pérdida de MS en el material forrajero conservado como ensilado, que puede llegar al 30-40%. Incluso la exposición al aire a corto plazo provoca pérdidas. Por ejemplo, la pérdida de MS del ensilado de maíz expuesto al aire durante sólo 1 ó 2 días se midió en un 6%. Además de las pérdidas económicas de nutrientes, alimentar a los rumiantes con ensilado deteriorado reduce la ingesta de nutrientes y disminuye la producción animal.
Medidas de control
Existen varios métodos para controlar el problema del deterioro aeróbico.
1. Cosecha y marchitamiento
Las investigaciones sobre el ensilado de maíz han demostrado que la proliferación de levaduras suele aumentar cuando el cultivo se recoge a partir de la fase de masa. Por lo tanto, hay una mayor posibilidad de deterioro aeróbico cuando el cultivo se corta maduro.
Las investigaciones sobre el ensilado de hierba han demostrado que un marchitamiento excesivo puede favorecer el deterioro aeróbico debido al aumento de la MS y a la falta de humedad que puede disipar el calor del material ensilado. Sin embargo, esto puede no ser un factor importante para otros cultivos. Por ejemplo, se ha comprobado que, en muchos casos, los cultivos cosechados con más del 50% de MS sí han soportado el calor y se han sometido a una fermentación normal.
2. Longitud del corte
El picado fino se recomienda generalmente para los cultivos cosechados con más del 30% de MS, ya que ayuda a la compactación adecuada y a la exclusión del aire de la masa ensilada.
3. Llenar el silo
Debe evitarse el llenado retardado, ya que permite la acumulación de microorganismos aeróbicos. En la Universidad Estatal de Kansas (EE.UU.) se realizó un estudio para comparar el llenado retardado con el llenado rápido de cuatro variedades diferentes de maíz y sorgo. Los resultados mostraron que el llenado rápido era ventajoso sobre el llenado retardado en términos de:
- Aumento de la relación lactato-acetato;
- Disminución del ácido butírico;
- Disminución del deterioro; y
- Aumento de la recuperación de MS.
En términos de rendimiento animal, la ganancia media diaria y la ingesta de MS fueron mayores para el ensilaje de llenado rápido. Sin embargo, este efecto fue más pronunciado con el ensilado de maíz que con el de sorgo.
4. Sellado del silo
Un sellado suficiente tiene efectos similares en la prevención de la acumulación de microorganismos aeróbicos y en la posterior estabilidad aeróbica del ensilado. Sin embargo, el sellado puede no ser un enfoque práctico para la aplicación en la granja, ya que es difícil prevenir el deterioro aeróbico, ya que el aire reemplaza el material de ensilaje que se ha retirado del silo.
5. Tipo de silo
Se prefieren los silos largos y estrechos a los cortos y anchos, porque permiten una rápida tasa de retroalimentación. Además, se prefiere la cara lisa del silo a la rugosa por la menor superficie que permite una menor penetración del aire.
6. Uso de inoculantes
En un estudio, los inoculantes microbianos para ensilaje basados en bacterias lácticas homo y heterofermentativas tuvieron efectos positivos significativos sobre la calidad del ensilaje de maíz en términos de mejora de la estabilidad aeróbica y de las características de fermentación (Tabla 1), con la consiguiente mejora de la ingesta y utilización del ensilaje.
7. Tratamiento químico
El uso de ácidos grasos volátiles puede ser útil para prevenir el deterioro aeróbico debido a sus propiedades antifúngicas. Sin embargo, este efecto puede variar en función de la longitud de la cadena de los ácidos. Así, el ácido propiónico es más eficaz que el ácido acético para prevenir el deterioro aeróbico. Las investigaciones realizadas en este ámbito han demostrado que la adición de un 1,25% de ácido propiónico (en base a la MS) impedía el deterioro aeróbico del ensilado.
Las referencias están disponibles a petición del autor.