Los agentes del mercado sugieren que el Gobierno estudie la posibilidad de reforzar el control de las importaciones de grano y fomentar la recuperación de tierras y la transformación de residuos agrícolas en piensos para hacer frente al encarecimiento de los piensos.
Egipto sufre escasez de carne de pollo de engorde, ya que algunas empresas se vieron obligadas a abandonar el negocio desde el inicio de la crisis de la industria de piensos en el país en 2022, según ha declarado recientemente Abdel Aziz Al-Sayed, jefe de la división avícola de la Cámara de Comercio de El Cairo, al medio local Maspero.
Según Al-Sayed, Egipto cubre el 80% de sus necesidades de maíz y cerca del 95% de las de soja mediante importaciones, y en los últimos años el aumento del coste de los piensos ha sido extraordinario.
Fin de las turbulencias
Entre las medidas reclamadas para racionalizar el suministro de piensos, Al-Sayed sugirió que el 100% de las importaciones de grano pasen por la Autoridad de Suministro de Materias Primas, una agencia gubernamental, en lugar de por empresas independientes.
En los últimos años, las importaciones de piensos a Egipto han sido turbulentas. Por ejemplo, varios incidentes en los que se bloquearon las existencias de trigo en los puertos egipcios debido a la escasez de dólares estadounidenses para pagar a los proveedores han causado estragos en la industria egipcia de piensos.
La medida permitirá al gobierno «intentar controlar el ritmo del mercado» garantizando un suministro constante de las materias primas necesarias, declaró Al-Sayed.
…los residuos procesados y tratados adecuadamente podrían reducir los costes operativos de la industria avícola, lo que a la larga beneficiaría a todos, «desde el Estado hasta los ciudadanos de a pie»
Recursos internos
Por su parte, Saeed Zaghloul, jefe de la división de ganadería de la gobernación de Giza, afirmó que es necesario un cambio fundamental en la política estatal, y hay que animar a los ganaderos a ampliar sus explotaciones para que el país pueda abandonar gradualmente la aguja de la importación.
Al-Sayed calculó que el país genera entre 80 y 100 millones de toneladas de residuos agrícolas al año, y estas cantidades también podrían utilizarse para paliar la escasez de piensos. Afirmó que «unos residuos debidamente procesados y tratados podrían reducir los costes operativos de la industria avícola, lo que a la larga beneficiaría a todos, desde el Estado hasta los ciudadanos de a pie»
El Dr. Salah Abdel Sattar Haggag, miembro del Comité de Riqueza Piscícola, también sugirió que el país redoblara sus esfuerzos por recuperar tierras agrícolas desiertas para ampliar la producción nacional de cereales.
Hussein Abu Saddam, jefe del Sindicato de Agricultores, coincidió en que las autoridades deben estudiar cada vez más el segmento de los residuos agrícolas para llenar el vacío existente en la industria de piensos. Reveló que algunos agricultores ya están intentando utilizar residuos de arroz, maíz y tomate para alimentar a los animales agrícolas, con éxito variable.
Saddam también se pronunció a favor de la recuperación de tierras, advirtiendo, no obstante, que lograr algún progreso tangible en este campo podría ser complicado en el contexto del empeoramiento de la escasez de agua.