Un grupo de científicos iraníes ha desarrollado un método para transformar residuos lignocelulósicos en piensos ricos en nitrógeno. Afirman que se trata de la primera tecnología de este tipo en la industria mundial de piensos.
En Irán se producen al año unos 21,5 millones de toneladas de residuos lignocelulósicos procedentes de la paja, según el Dr. Kian Mehr, uno de los investigadores principales. Son fuentes baratas y abundantes de fibra, aunque su uso en la industria de piensos se ha visto tradicionalmente limitado por su baja digestibilidad.
Resolver este problema tiene una enorme importancia práctica para Irán, que actualmente depende en gran medida de la importación de piensos y tiene que gastar divisas para abastecerse de insumos muy necesarios, comentó el Dr. Mehr.
Falta de piensos en Irán
Los responsables de la industria ganadera iraní han expresado repetidamente su preocupación por la falta de piensos durante el pasado año.
Por ejemplo, Gorgan Iftakharuddin, miembro de la junta directiva del sindicato de fábricas de piensos para aves de Golestán, ha declarado recientemente que la industria avícola se ve afectada por una falta de harina de soja tan grave que podría provocar el cierre masivo de operaciones en la región.
Múltiples ventajas
Los científicos afirman haber utilizado el enriquecimiento en nitrógeno y la oxidación para mejorar la digestibilidad de la biomasa lignocelulósica, aunque no se han facilitado más detalles. Una serie de ensayos preliminares han demostrado que la biomasa procesada con la tecnología desarrollada, cuando se añade a la alimentación del ganado, también reduce las emisiones de metano en un sólido 67%.
El procesamiento lleva poco tiempo, requiere temperatura y presión ambiente y puede utilizarse con una amplia gama de biomasa en estado sólido sin necesidad de recuperar previamente los productos químicos, declaró el Dr. Mehr, hablando de las ventajas del método desarrollado. Además, prácticamente no genera residuos ni subproductos tóxicos.
Se prevé un uso industrial
Los residuos lignocelulósicos también son buenos para la producción de pellets para piensos, gracias a su alto contenido en lignina, que se utiliza como aglutinante natural. En teoría, según los científicos, el uso de residuos lignocelulósicos como componente de los piensos permitiría a los fabricantes de piensos ahorrar dinero en costes energéticos y necesitar menos aglutinantes.
Por otro lado, parece que la tecnología está relativamente lejos de la comercialización. Hasta ahora, el procesamiento de residuos lignocelulósicos sólo se ha llevado a cabo en condiciones de laboratorio. Los investigadores creen que todavía tienen que perfeccionar su método antes de que pueda ofrecerse para la producción en masa.