Rumania sólo ha sido miembro de la Unión Europea (UE) durante 10 años, pero ya alberga la mayor explotación agrícola de la UE, con la friolera de 57.000 hectáreas. All About Feed habló con Constantin Dulute, propietario de esta empresa llamada Agricost.
Esta granja insular, gestionada como Agricost, se extiende por las tierras fértiles en torno a la isla de Braila, en la parte sudoriental del país, tiene 60 kilómetros de largo y 11 kilómetros de ancho, y está dividida en 29 subgranjas, cada una de las cuales gestiona sus propios cultivos. Agricost se ha convertido en el mayor productor de cereales de Rumania y recibe alrededor de 10 millones de euros al año en subvenciones de la UE. El transporte del grano desde la granja hasta los clientes es muy fácil, ya que está situado cerca del puerto de Braila en el río Danubio, donde las barcazas transportan constantemente el grano en la temporada de cosecha. La granja puede almacenar su propio grano en el lugar, pero junto con las instalaciones de almacenamiento del puerto la capacidad total alcanza más de 50.000 toneladas.
Abierto a las inversiones extranjeras
A vista de pájaro, Rumania tiene una superficie agrícola total de 14,7 millones de hectáreas, de las cuales 9,3 millones de hectáreas se utilizan para fines agrícolas. Sin embargo, debido a la falta de inversión y de irrigación, hasta 1,3 millones de hectáreas de esta tierra cultivable quedan sin utilizar cada año.
Esto puede cambiar en el futuro, ya que Rumania es el único país de Europa oriental que permitirá a los inversores extranjeros comprar tierras directamente sin necesidad de concertar acuerdos de alquiler locales.
La influencia del dinero de la UE es visible
Rumania ascendió a la UE en 2007 y, al viajar por el país, es evidente la gran influencia que el dinero de la UE ha tenido en la agricultura y la infraestructura. Las grandes explotaciones agrícolas son cada vez más grandes, la infraestructura de carreteras está mejorando, los tractores y la maquinaria están cada vez más avanzados y los rumanos se están volviendo más respetuosos con la tecnología a un ritmo muy rápido.
Agricost
Agricost es una compañía propiedad de Constantin Dulute. Lucian Buzdugan es el presidente del consejo de administración. Toda la tierra se alquila al gobierno rumano con contratos de 30 años, pero toda la red de carreteras de la granja, los sistemas de riego e incluso una barcaza para transportar el cereal desde el puerto cercano, han sido proporcionados por Agricost.
La cosecha de los agri-cultores
En 2016, Agricost cosechó 416.000 toneladas de grano, que fue la más alta de una sola granja en Rumania. El nuevo objetivo de la granja se ha fijado en producir 500.000 toneladas en 2018. La cosecha de 2017 consiste en:
- 14.853 hectáreas de trigo de otoño
- 8.048 hectáreas de cebada de otoño
- 11.707ha de maíz
- 10.056 hectáreas de soja
- 8.184 hectáreas de girasoles
- 2.520 hectáreas de heno de alfalfa y
- 260 hectáreas de guisantes
Dando un total de 55.638 hectáreas y el resto en barbecho. La colza fue plantada previamente en la granja pero justo el año pasado se tomó la decisión de cesar este cultivo, ya que no estaba generando beneficios.
Los niveles de agua dificultan los promedios de rendimiento de Rumania
Los promedios de rendimiento en Rumania son bajos en comparación con otras naciones cultivables de la UE debido a la escasez o incluso al diluvio de agua. En la mayoría de los casos no hay suficiente agua para mantener las cosechas, mientras que en casos extremos las lluvias torrenciales o el granizo pueden acabar con una cosecha de la noche a la mañana. De hecho, el 70% de la tierra es irrigada y hay planes para irrigar el resto con la ayuda de los fondos de la UE. Sin embargo, como la tierra es realmente una isla formada, el siglo pasado, a partir del río Danubio, así que cuando el río sube el nivel de las aguas subterráneas también sube y en la primavera puede inundar fácilmente los cultivos. Para tratar de manejar el exceso de agua de lluvia, Agricost construyó más de 150 kilómetros de canales para drenar el agua de vuelta al Danubio con la ayuda de 32 bombas de alta capacidad.
El objetivo de los agrónomos para la próxima cosecha
Para la próxima cosecha, el equipo de Agricost tiene como objetivo un rendimiento medio de
- trigo – 8t/ha
- Cebada – 9t/ha
- girasol – 3.7t/ha
- soja – 4 t/ha y
- maíz – 12 t/ha
Tradición, rendimiento e innovación
Constantin Dulute, propietario de Agricost, dijo: «La tradición, el rendimiento y la innovación, pero también la aplicación de nuevas tecnologías basadas en la gestión eficiente de los recursos, en armonía con el medio ambiente representa la misión de Agricost. Con todo esto en mente, fuimos capaces de cosechar más de 410.000 toneladas en 2016. Para el año 2018, estamos persiguiendo económicamente una producción de 1.000 toneladas por empleado activo con una producción total de 500.000 toneladas ese año mediante la ampliación de las tecnologías de siembra directa».
Maíz: El cultivo más rentable de la granja
En la última cosecha, lograron un rendimiento de 13,3 toneladas por hectárea y recibieron 150 euros por tonelada por ello. Lucian Buzdugan explica: «Nuestro objetivo es plantar alrededor de 75.000 plantas por hectárea a distancias de 50 cm por 26 cm. Solíamos sembrar en hileras de 70cm por 19cm pero después de probar encontramos que el menor espaciamiento nos da más. Permite más sol y flujo de aire en el cultivo. Nuestro costo por hectárea para el maíz está en la región de 1.428 euros, así que con el subsidio obtenemos más de 725 euros por hectárea de beneficio.
El 90% del total de los granos producidos se venden en el mercado de valores
Sembramos nuestro trigo en alrededor de 500 a 550 semillas por metro cuadrado en filas de 25cms predominantemente variedades rumanas. Cuando se trata de vender los granos, sólo el 10% de toda la producción de Agricost se vende directamente a los clientes y el resto en el mercado de valores.
Lucian dice que Rumania está siendo discriminada en lo que se refiere al uso de OGMs.
Dijo: «La UE nos ha prohibido el uso de OGM en Rumanía, pero aún así nos permite importar piensos genéticamente modificados. Eso es una discriminación en términos. La soja transgénica podría ayudarnos a resistir a las enfermedades y a reducir los pesticidas, pero se nos prohíbe utilizarla. ¿Dónde está el sentido de esto?», concluyó.
