La perforación de primavera impulsa las zonas cerealistas francesas

Tras los graves problemas que muchos agricultores franceses han tenido con la siembra durante los húmedos y fríos meses de otoño, que a menudo han retrasado o incluso impedido el trabajo en sus tierras, la siembra de los cultivos de primavera ha dado lugar a un panorama general más positivo.

El gran triunfador es el maíz grano, que esta campaña se siembra en 1,36 millones de hectáreas, un 10,5% más que en 2023, con un aumento en todas las regiones donde se cultiva, según las últimas estimaciones de la oficina de información y estadística agraria Agreste.

Los agricultores franceses cultivan también unos 1,26 millones de hectáreas de maíz forrajero, una superficie más o menos estable en términos interanuales, pero inferior en un 3,5% a la media de los últimos cinco años. En 2020, Francia seguirá cultivando 1,65 millones de hectáreas de maíz grano y 1,36 millones de hectáreas de maíz forrajero, según los datos de Agreste.

Especialmente importante para la cebada

La siembra de primavera ha sido especialmente importante para la cebada, con una superficie de 502.000 hectáreas, un 12,2% más que el año anterior. La superficie de cultivos de invierno fue un 5,8% inferior, con casi 1,29 millones de hectáreas, pero si se añaden los cultivos de primavera, la superficie total de cebada sólo disminuyó un 1,4%, hasta 1,79 millones de hectáreas.

Perforación mínima para el trigo

En cuanto al trigo, la siembra de primavera fue mínima, con 20.000 hectáreas, lo que supone un aumento del 5,0%, lo que condujo a una superficie total de trigo blando de 4,4 millones de hectáreas, todavía un 7,5% menos que el año pasado.

Soja

La superficie francesa de soja es este año un 5,5% inferior a la de la campaña anterior, con sólo 149.000 hectáreas. Esta superficie de soja es también un 11,8% inferior a la media de las 5 campañas anteriores, lo que confirma una tendencia de larga duración.

Cambiar al girasol, más rentable

En los últimos años, algunos agricultores franceses se han pasado al girasol, que últimamente ofrece mayores beneficios. La superficie total de girasol este año se estima en un máximo histórico de 823.000 hectáreas, unas 220.000 más que hace 5 años.

El triticale, el mayor de los cultivos de cereales menores del país, ocupa esta campaña 298.000 hectáreas, un 8,6% menos que en la campaña anterior de 2023 y un 5,2% menos que la media de 5 años.

Para completar el cuadro: la avena sólo ocupa 79.000 hectáreas, el centeno 36.000 hectáreas.

Las cifras finales podrían mostrar un panorama diferente

Sin embargo, las cifras finales de la cosecha y la producción de este año podrían mostrar un panorama diferente, ya que Francia se ha visto asolada una vez más por lluvias torrenciales y persistentes, especialmente en las importantes regiones cerealistas del norte del país. Muchas parcelas del Paso de Calais y los departamentos vecinos se han inundado por enésima vez. También se han registrado problemas de agua en la zona de la Gironda, alrededor de Burdeos, y en el noroeste, en el entorno de Reims.