Este mes, los precios de los principales cereales se mantuvieron en general firmes en medio de la reducción de los suministros de exportación y la robusta demanda mundial.
Según la FAO, que publica el índice de precios de los alimentos, un indicador de las variaciones mensuales de los precios internacionales de una cesta de productos alimenticios y los índices de productos básicos como el índice de precios de los cereales. En general, los precios mundiales de los alimentos comenzaron el año con una nota boyante, ya que el índice de precios de los alimentos de la FAO alcanzó un promedio de 164,8 puntos en enero de 2019, un 1,8% más que el mes anterior. Un fuerte repunte de las cotizaciones de los precios de los productos lácteos y unos precios más firmes de los aceites de palma y de soja impulsaron el aumento. El Índice de Precios de los Alimentos, todavía estaba 2,2% por debajo de su nivel de enero de 2018.
Aumenta la producción de cereales
El Índice de la FAO para los precios de los cereales alcanzó un promedio de 168,1 puntos en enero, con un aumento marginal respecto de diciembre. Los precios de los principales cereales se mantuvieron en general firmes en medio de una oferta de exportación cada vez más reducida y una demanda mundial robusta, como se indica en el último informe sobre la oferta y la demanda de cereales, publicado también por la FAO. Los autores del informe escriben que la estimación de la producción mundial de cereales en 2018 se eleva a 2.611 millones de toneladas, lo que refleja las revisiones al alza del maíz, el trigo y el arroz. Las perspectivas de la producción de trigo son positivas para 2019, y las primeras perspectivas apuntan a importantes repuntes en la Unión Europea y la Federación de Rusia. Las perspectivas del maíz, que pronto se cosechará en el hemisferio sur, son en general buenas en la Argentina y el Brasil, mientras que el tiempo seco ha afectado negativamente a las plantaciones y las perspectivas de rendimiento en Sudáfrica.
Australia necesita más trigo forrajero
La FAO elevó su estimación de la utilización mundial de cereales en la temporada 2018/19 a 2.657 millones de toneladas, lo que representaría un aumento del 1,7% con respecto al nivel de 2017/18. Se prevé que aumente la utilización de cereales para alimentar al ganado, ya que Australia necesita más trigo debido al impacto del clima seco en los pastos y China, México y los Estados Unidos han ampliado el uso de los cereales secundarios hasta un máximo histórico. Como se prevé que la utilización supere la producción, las existencias mundiales de cereales disminuirán en 45 millones de toneladas, o un 5,6%, con respecto a sus niveles de apertura máximos. Esto daría lugar a que la relación entre las existencias mundiales y la utilización de cereales disminuyera hasta el 28,5%, por debajo de un máximo de casi dos décadas de 30,8% en 2017/18. El comercio internacional de todos los cereales se acercará probablemente a los 416 millones de toneladas en la temporada comercial 2018/19, ligeramente por debajo del volumen récord de 2017/18, según la última previsión de la FAO.
Fuente: FAO