Muchos estudios muestran el impacto negativo del DON en pollos de engorde cuando el nivel de esta micotoxina está muy por encima de lo recomendado por las directrices de la UE, es decir, 5.000 µg/kg (EC 576/2006)

Más recientemente, se ha demostrado que la contaminación dietética con 2.500 µg/kg de DON es suficiente para perjudicar la mineralización de los huesos en los pollos (Keçi et al., 2019). Además, en un estudio longitudinal, Kolawole et al. (2020) demostraron que más del 50% de las dietas utilizadas para alimentar a los pollos de engorde contienen los derivados del DON 3-Acetilo-DON (3-Ac-DON) en concentraciones medias de 42,1 µg/kg. Tanto el 3 como el 15 c-DON se encuentran a menudo en alimentos contaminados con altos niveles de DON porque el 3+15 Ac-DON es producido por el mismo Fusarium que produce DON

Figura 1 – FCR de pollos de engorde alimentados con dietas que contienen diferentes niveles de DON y 3+15 Ac-DON.

Los niveles máximos aceptables de DON en los cereales y los subproductos de cereales utilizados para la producción de piensos son de 8.000 µg/kg, mientras que para los subproductos de maíz son de 12.000 µg/kg (EC 576/2006). Por lo tanto, en condiciones realistas, una dieta a base de maíz preparada con un alto nivel de inclusión de un grano tan contaminado tendrá un nivel final de DON de aproximadamente 4.000 µg/kg o menos

Para determinar adecuadamente los riesgos de pérdidas y las medidas que deben adoptarse, es necesario evaluar los efectos de las dietas contaminadas naturalmente que contienen niveles de DON cercanos a los observados en la práctica. En un estudio reciente realizado por SFR, se alimentó a pollos de engorde con dietas contaminadas naturalmente con DON y sus derivados a 3 niveles diferentes (~ 1.700, 2.700 o 3.500 µg/kg para el DON; y ~ 30, 45 o 65 µg/kg para 3+15 Ac-DON)

FCR
Durante el período inicial, la peor FCR se observó cuando se alimentó a los pollos de engorde con la dieta que contenía ~2.700 µg/kg de DON, pero es importante señalar aquí que durante este período las aves tienen una menor ingesta de alimento y por lo tanto consumen una pequeña cantidad de la dieta. Lo más importante es que las dietas con el nivel más alto probado, es decir, ~ 3.500 µg/kg, combinadas con 3+15 Ac-DON causaron el impacto más perjudicial en la FCR de los pollos de engorde durante el período de crecimiento. Aunque no se observaron diferencias en la FCR en los períodos de fin de vida o de alimentación general, hay que tener en cuenta que no se pueden excluir las pérdidas económicas conexas. Por ejemplo, otras fuentes de estrés en el intestino podrían tener un impacto negativo en el rendimiento de las aves