La Septoria es la enfermedad fúngica más frecuente en el trigo de Europa occidental, sobre todo en las estaciones de crecimiento más húmedas, cuando causa grandes daños en los campos de trigo. Las variedades de trigo que se cultivan en Europa sólo son parcialmente resistentes, por lo que, para reducir la infestación y las pérdidas, es habitual la pulverización con fungicidas

«El hongo septorios produce grandes cantidades de material infeccioso en los residuos de los rastrojos en otoño, que se propagan de campo a campo a grandes distancias», dijo la investigadora principal, Lise Nistrup Jørgensen, del Departamento de Agroecología – Salud de los Cultivos, de la Universidad de Aarhus, en Dinamarca

Los azoles como fungicidas en el trigo

Los agricultores tienen cada vez más problemas de resistencia debido al uso intensivo de azoles para combatir la septoria. Esta resistencia se observa en relación con los azoles «antiguos», que llevan décadas en el mercado

Los azoles son una clase de compuestos heterocíclicos de 5 miembros que contienen un átomo de nitrógeno y al menos otro átomo no carbónico. Estas sustancias actúan sobre muchos tipos diferentes de hongos y se han utilizado en la agricultura para controlar las enfermedades fúngicas de las hojas del trigo durante más de 40 años. Los azoles siguen considerándose un grupo importante y forman parte de muchos productos de mezcla y estrategias de control, a pesar de los crecientes problemas de resistencia

Efectos variables de los azoles en el trigo en toda Europa

En una red europea, Eurowheat, se llevaron a cabo ensayos de campo dirigidos por la Universidad de Aarhus en 10 países europeos (Escocia, Inglaterra, Polonia, Francia, Alemania, Irlanda, Bélgica, Letonia, Lituania y Hungría) con el objetivo de crear una visión actualizada del efecto de los azoles sobre las enfermedades relevantes del trigo. En estos ensayos se han incluido tanto las enfermedades de la septoriosis como las de la roya

«Realizamos un total de 55 ensayos de campo en el periodo 2015-2018, donde, entre otras cosas, probamos los 4 azoles más comunes: epoxiconazol, protioconazol, tebuconazol y metconazol. En los experimentos, descubrimos que el efecto de los azoles variaba mucho en general en toda Europa. También vimos que el efecto se reducía a lo largo del periodo de prueba», dijo Jørgensen

Algunos «efectos inaceptables» de los azoles en el trigo

«Por término medio, los azoles protegen aproximadamente el 60% contra la septoria, pero varía mucho, no sólo entre las distintas regiones, sino también de un año a otro. En aproximadamente el 30% de nuestros ensayos de campo los azoles pudieron controlar menos del 50% de la septoriosis, y en algunos ensayos de Inglaterra, Francia y Alemania, algunos ensayos de campo mostraron incluso reducciones de la enfermedad inferiores al 30%, lo que debe considerarse como efectos inaceptables.»

Jørgensen añadió que, aunque hay zonas en las que se cuestiona el impacto, «también podemos concluir que los azoles siguen siendo beneficiosos en la lucha contra la septoriosis en la mayor parte de Europa, sobre todo como compañeros de mezcla, que ayudan a reducir el desarrollo de la resistencia a otros grupos de fungicidas»

El nuevo azol tiene un mayor efecto

En 2 de las temporadas de cultivo, también se incluyó en el ensayo un nuevo azol -mefentrifluconazol- introducido en 2020, que mostró un efecto significativamente mayor que los 4 azoles «antiguos». Esto, según los investigadores, confirma que no hay una clara resistencia cruzada entre los azoles, lo que significa que el nuevo azol no es inhibido por las mutaciones encontradas en la población de septorios, que inhiben el efecto de los azoles «antiguos»

«El nuevo azol… es actualmente de gran importancia para el control de la septoria en Europa», declaró Jørgensen

Fungicidas: controvertidos y problemáticos

La universidad señala que el uso de fungicidas es «controvertido y problemático» en relación con el deseo del público de un menor consumo de pesticidas. Además, se esperan nuevas restricciones en el número de azoles aprobados y legales en la UE

Incluso con el aumento de la resistencia en varios lugares de Europa, los azoles nuevos y «viejos» son útiles contra la Septoria, señala Jørgensen, advirtiendo, sin embargo, que no podemos «sentarnos y relajarnos»: «Tenemos que centrarnos más en aumentar la prevalencia de las variedades resistentes a la Septoria, lo que reduce la necesidad de pulverizar. También es importante que contemos con estrategias integradas contra la resistencia a los fungicidas que puedan optimizar la forma en que utilizamos los fungicidas, incluyendo menos pulverizaciones, la pulverización según la evaluación de las necesidades, la pulverización con mezclas de grupos de sustancias activas y la pulverización con dosis bajas y adaptadas. Estos elementos ayudarán a garantizar que podamos seguir cultivando trigo en Europa en el futuro sin grandes pérdidas por la septoria», concluyó Jørgensen