La Comisión Europea publicó por primera vez el 10 de abril un balance completo de las proteínas de la UE.
El balance de proteínas de la UE para 2015/2016 es un panorama general de la producción, el consumo y el comercio totales de la UE de todas las fuentes comercializables de proteínas utilizadas en la producción de piensos. Además de los conocidos materiales ricos en proteínas como la harina de soja, la harina de colza y las leguminosas, el balance incluye fuentes con menor contenido proteínico como los cereales.
Importación de fuentes ricas en proteínas
El balance muestra las necesidades totales de proteínas en la UE, y la producción de cereales y semillas oleaginosas (es decir, la harina de colza y de girasol derivada de la trituración doméstica) de la UE proporciona la mayor parte de las necesidades de proteínas crudas. También confirma la fuerte necesidad de importar fuentes ricas en proteínas como la harina de soja y los frijoles de soja para su trituración en la UE. Debe quedar claro que las distintas fuentes de proteínas vegetales tienen perfiles nutricionales diferentes y no pueden sustituirse entre sí.
Aumentar la dependencia de las importaciones
En respuesta a la publicación, COCERAL, el Copa-Cogeca, FEDIOL y la FEFAC apreciaron los esfuerzos de la Comisión por elaborar un instrumento específico e independiente para vigilar el equilibrio de la demanda y la disponibilidad de cultivos proteínicos en la UE, que contribuirá a la transparencia del mercado y ayudará a los operadores a comprender mejor la evolución del mismo. Ello permite celebrar debates informados y evaluar los posibles cambios en el sector agrícola y la Política Agrícola Común (PAC), los usos no agrícolas como los biocombustibles, las políticas fitosanitarias y comerciales y las políticas antidumping que podrían afectar a la disponibilidad de fuentes de proteínas para los ganaderos de la UE, así como aumentar la dependencia de las importaciones.
El segundo balance se publicará después del verano de 2017
El acceso seguro y previsible a un suministro estratégico de proteínas para satisfacer la demanda y alimentar a los animales de granja es fundamental para la competitividad y la capacidad de recuperación del sector ganadero y de piensos de la UE. La Comisión ha indicado que después del verano de 2017 se publicará un segundo balance de proteínas de la UE, una vez que se disponga de los datos correspondientes a toda la campaña comercial 2016/17, lo que contribuirá a los debates en el ámbito del observatorio europeo del mercado de cereales, oleaginosas y proteaginosas.