Los precios internacionales de los productos alimenticios bajaron en octubre, ya que la caída de los precios de los productos lácteos, la carne y los aceites vegetales compensó con creces el aumento de los precios del azúcar, dijeron hoy las Naciones Unidas.
El índice de precios de los alimentos de la FAO, que mide la variación mensual de los precios internacionales de una cesta de productos alimenticios, alcanzó un promedio de 163,5 puntos en octubre, un 0,9% menos que en septiembre y un 7,4% menos que el año anterior.
El índice de precios de los cereales de la FAO repuntó
El Índice de la FAO para los precios de los productos lácteos encabezó la disminución general, con una caída del 4,8% respecto del mes anterior y un 34% por debajo del máximo alcanzado en febrero de 2014. La disminución de los precios refleja el aumento de los suministros de exportación de todos los principales productos lácteos, especialmente los procedentes de Nueva Zelandia. El índice de la FAO para los precios de la carne disminuyó un 2,0% desde septiembre, y la carne de ovino, cerdo, bovino y aves de corral registró caídas debido principalmente a la abundancia de suministros de exportación.
El índice de precios del aceite vegetal de la FAO cayó un 1,5%, su novena caída mensual consecutiva, hasta alcanzar su nivel más bajo desde abril de 2009. La última caída se debió principalmente a la lenta demanda mundial de importación de aceite de palma y a las grandes existencias de los principales países exportadores del producto. Los precios internacionales del aceite de soja aumentaron ligeramente. El índice de precios de los cereales de la FAO se recuperó y aumentó un 1,3% desde septiembre, debido principalmente a la mayor firmeza de las cotizaciones del maíz de los Estados Unidos de América. Los precios del arroz, en cambio, bajaron, influenciados en parte por los movimientos de la moneda que pesan sobre las variedades japonesas y fragantes. El índice de precios del azúcar de la FAO aumentó un 8,7%, principalmente como resultado de las perspectivas negativas de producción relacionadas con el clima en la India e Indonesia, así como de los indicios de que una parte cada vez mayor de la producción de caña de azúcar del Brasil se utiliza para producir etanol.
Las previsiones de la producción mundial de cereales aumentaron
La FAO también ha aumentado su previsión de la producción mundial de cereales en 2018 a 2.601 millones de toneladas, debido principalmente a las mayores estimaciones de la producción de trigo en el Canadá y China. No obstante, el nuevo pronóstico sigue siendo un 2,1% inferior al nivel sin precedentes alcanzado en 2017. La producción mundial de cereales secundarios se pronostica en 1.360 millones de toneladas, lo que supone una disminución del 2,2% con respecto a 2017. Las cosechas de cereales secundarios se están plantando actualmente en los países del hemisferio sur, y las primeras perspectivas indican una expansión de las plantaciones de maíz en América del Sur. La FAO prevé que la utilización mundial de cereales aumente un 0,2% hasta alcanzar la cifra récord de 2.653 millones de toneladas, impulsada por el aumento de los usos industriales y para piensos del maíz, especialmente en China y los Estados Unidos. Se prevé que el uso de trigo para el consumo de alimentos aumente en un 1,0%, mientras que el del arroz lo hará en un 1,1%. Se prevé que las existencias mundiales de cereales al cierre de las temporadas en 2019 alcancen casi 762 millones de toneladas, aproximadamente un 6,5% por debajo de su nivel récord de apertura.
Fuente: FAO