Rusia seguirá importando soja transgénica hasta 2023

El Ministerio de Agricultura ruso pretende mantener las normas actuales de importación de soja transgénica al país hasta al menos el 1 de enero de 2023, para no poner en peligro «la campaña de adquisición de piensos, los planes de negocio de las empresas ganaderas y avícolas, y no provocar un aumento de los precios de los piensos», según la nota explicativa del decreto.

En abril de 2020, el Ministerio introdujo un régimen simplificado de importación de soja OMG. Varias líneas de soja, cuya seguridad había sido confirmada por el organismo veterinario ruso Rosselkhoznadzor, fueron retiradas del registro estatal obligatorio de OMG. En enero de 2021, el régimen simplificado de importación se prorrogó hasta el 1 de enero de 2022

Se pretende evitar la subida de precios en el mercado nacional de piensos

La medida está llamada a evitar una fuerte subida de los precios en el mercado nacional de piensos. En 2020, Rusia cosechó 4,3 millones de toneladas de soja, mientras que la demanda interna es de 5,5 millones de toneladas al año. Casi toda la soja que se importa en Rusia está sometida al régimen simplificado

«La ausencia del registro estatal no implica el envío incontrolado de soja transgénica a Rusia, sino que da a las empresas el derecho a importar materias primas con líneas transgénicas que ya habían sido registradas anteriormente y habían sido sometidas a numerosos estudios de seguridad», dijo el Ministerio

Sin impacto en la producción nacional de soja

Además, el Ministerio dijo que no esperaba que la producción nacional de soja se viera obstaculizada en modo alguno por las importaciones de OMG, ya que el número de líneas sometidas al régimen simplificado sigue siendo bastante limitado. La totalidad de las importaciones de soja transgénica en régimen simplificado procede de América Latina

Se pide que se elimine el registro de la soja transgénica

Alexander Korbut, vicepresidente de la Unión Rusa de Cereales, declaró a la revista rusa Agroinvestor que, en su opinión, el registro estatal de la soja y la harina transgénicas debía cancelarse por completo, ya que suponía un coste considerable para las empresas rusas

«Importamos productos ganaderos del extranjero, donde la mayoría de los países utilizan piensos que contienen OMG», subrayó Korbut, explicando que los productos ganaderos fabricados con el uso de tecnologías transgénicas llegan de una forma u otra a las estanterías de los supermercados rusos.

«Si la iniciativa de prorrogar la anulación del registro estatal obligatorio ha sonado, quizá no haya otra alternativa», comentó Sergei Mikhnyuk, presidente de la Unión Rusa de Productores de Piensos. «También es probable que se trate de algún tipo de solución temporal destinada a evitar los problemas logísticos, a los que nos enfrentamos a menudo últimamente, y que proporcione al mercado el volumen necesario de materias primas»