La Asociación Ucraniana de Cereales ha expresado su preocupación por que la lucha del Estado contra la exportación de cereales en la sombra pueda arruinar a todo el sector.
En virtud de un decreto aprobado recientemente por el gobierno ucraniano, la exportación de grano y semillas oleaginosas sólo se permitirá a las empresas que superen un procedimiento de verificación de exportadores recientemente establecido para demostrar que cumplen plenamente los controles de divisas.
Ingresos de divisas por exportaciones
La medida está llamada a ayudar al gobierno a combatir la exportación de grano en la sombra, durante la cual las divisas no se devuelven a Ucrania, como exige la ley.
Cerca del 20% del grano ucraniano se exporta en la actualidad con arreglo a esquemas grises, según estimaciones de Think Brave, una consultora con sede en Kiev. Por lo general, esto significa que el grano es comprado a los agricultores a cambio de dinero en efectivo por empresas clandestinas. Se exporta con documentos falsos y la empresa se liquida poco después para que los propietarios no devuelvan a Ucrania los ingresos en divisas.
Preocupación por que las nuevas normas acaben con la industria
La Asociación Ucraniana de Cereales afirmó que «el reciente aumento del número de iniciativas encaminadas a imponer normativas adicionales» a los agricultores ucranianos podría acabar con la industria cerealista.
Las nuevas normas deberían haber sido probadas adecuadamente para asegurarse de que no pondrán obstáculos al negocio, de importancia crítica para el Estado ucraniano en las actuales circunstancias, declaró la asociación cerealista.
Para complicar aún más la situación
Como el nuevo plan no se ha probado, puede complicar aún más las cosas en el mercado de cereales, ya bastante regulado, y provocará una caída significativa de las exportaciones y, en consecuencia, de los precios del grano para los agricultores ucranianos, advirtió la asociación cerealista.
«Como resultado, los agricultores ucranianos, que llevan dos años sufriendo los bajos precios de compra y los elevados costes logísticos debido a las escasas oportunidades de exportación, pueden quebrar y perderlo todo»
«En este caso, el país perderá casi la única industria que llena el presupuesto [del Estado] en tiempos de guerra y proporciona al país ingresos en divisas. En estas condiciones, una injerencia adicional mal concebida e innecesaria en la regulación de los mercados de cereales y de exportación sólo perjudicará al país», añadió la asociación cerealista.
Más medidas en proyecto
El 16 de noviembre, la Comisión de Finanzas, Impuestos y Política Aduanera de la Rada Suprema apoyó dos proyectos de ley destinados a combatir las exportaciones «negras» de cereales y la no devolución de ingresos en divisas, según declaró el diputado Yaroslav Zheleznyak en sus redes sociales.
Según el proyecto de ley, las autoridades fijarán un precio mínimo por debajo del cual los agricultores ucranianos podrán exportar grano.
Zheleznyak añadió que las exportaciones en la sombra cuestan al país entre 4.000 y 6.000 millones de dólares de ingresos por exportación no devueltos, lo que supone pérdidas sustanciales para el presupuesto del Estado.