Los caballos pueden enfermarse tras la ingestión de plantas o productos químicos tóxicos. Esto puede dañar el tracto gastrointestinal, según los investigadores. Aquí enumeramos 3 ejemplos de envenenamiento.
Cuando las toxinas son ingeridas por el caballo, a menudo el extenso daño específico de los órganos eclipsa las lesiones gastrointestinales. Por lo tanto, las lesiones intestinales a menudo se pasan por alto. Describimos algunas toxinas y plantas venenosas que causan principalmente enfermedades gastrointestinales en los caballos.
Toxicidad por metales pesados
Los metales pesados rara vez envenenan a los caballos y, cuando lo hacen, generalmente son causados por una mala formulación de las medicinas o de la dieta (mercurio, selenio), por pastos contaminados (plomo, zinc, arsénico) o por agua contaminada (cadmio). Todos los metales pesados producen lesiones gastrointestinales con cólicos y enteritis hemorrágica; sin embargo, la mayoría también producen una extensa enfermedad neurológica o nefrosis, lo que hace que las lesiones intestinales parezcan menores en comparación. El envenenamiento por arsénico, por ejemplo, suele ser causado por alimentos contaminados, especialmente granos contaminados. El envenenamiento por mercurio es poco común hoy en día, porque su toxicidad es bien conocida y su uso se ha suspendido en la mayoría de los procesos medicinales, de fabricación e industriales.
Daños mecánicos y obstrucción
Hay varias hierbas, como la cola de zorro, el centeno de cabeza de medusa y el triticale, que causan daños mecánicos al lesionar las superficies mucosas de la boca, los ojos, los oídos, los pliegues de la piel y al migrar a través de los tejidos blandos. Se recomienda evitar el heno contaminado y mantener los pastos para evitar la exposición. Además, algunas plantas tienen fibras indigeribles, rebabas y algunas partes de plantas mal identificadas que causan concreciones en el tracto gastrointestinal, especialmente en el colon equino, donde aumentan de tamaño hasta obstruir de manera intermitente o permanente la función y el flujo colónicos. De las plantas, el caqui es la que tiene la mayor asociación porque se ha informado de que causa brotes epidémicos de fitobezoares gástricos equinos y cólicos.
Ingestión de plantas productoras de toxinas
Se sabe que algunas bellotas de la especie Solanum envenenan el ganado. Estas plantas producen varios síndromes tóxicos porque contienen glicoalcaloides esteroides que causan gastroenteritis grave e inhibidores de la colinesterasa que producen enfermedades neurológicas. El tratamiento generalmente es sintomático con el uso de terapia de fluidos, carbón activado y el uso cauteloso de colinérgicos como la fisostigmina. Algunas especies de Solanum invaden los campos y comúnmente contaminan el heno, donde pueden envenenar el ganado. Otras plantas productoras de toxinas son Pokeweed (Phytolacca americana), Ricinus communis (semilla de ricino), Jimsonweed (Datura stramonium), Convolvulus arvensis (lenteja de campo, morning glory) y Black and New Mexican black locust (Robinia pseudoacacia y R neomexicana).
Esta información fue tomada del artículo: Causas tóxicas de las enfermedades intestinales en los caballos, por Stegelmeier, B.L., y T.Z. Davis. Clínicas Veterinarias de América del Norte: Práctica Equina. En prensa.