Las previsiones de cosecha contenidas en un nuevo informe sobre cereales del Departamento de Agricultura de Estados Unidos (USDA) ya hicieron bajar ligeramente los precios del trigo el viernes.
El lunes se sumaron los efectos de unas previsiones meteorológicas más favorables en Estados Unidos. Al inicio de las operaciones del lunes en Chicago, los precios del trigo de los contratos más negociados (septiembre y diciembre) cayeron más de un 2%. Esto significa que las previsiones meteorológicas tienen actualmente una mayor influencia en el precio del trigo que los resultados del informe mensual sobre el grano.
No hay muchas sorpresas
El informe no contiene muchas sorpresas. Por ejemplo, la estimación de la cosecha de trigo en Rusia se ha incrementado en 6,5 millones de toneladas, hasta alcanzar los 88 millones de toneladas. En Australia, Canadá y China, la cosecha de trigo también se estima ahora superior a la de hace un mes. En cambio, se han rebajado las estimaciones de la UE y la India.
El stock se está ajustando
En total, el USDA estima ahora que la producción mundial de trigo es unos 8 millones de toneladas más alta, con 780 millones de toneladas. Sin embargo, las existencias de la cosecha del año pasado se han revisado a la baja, lo que significa que la disponibilidad total de trigo es menor. En combinación con un consumo creciente (hasta los 789 millones de toneladas), la conclusión es que las existencias serán un poco más ajustadas a finales de año, con 267 millones de toneladas.
Si se cumplen las últimas predicciones de unas condiciones de crecimiento más favorables, el precio seguirá estando bajo cierta presión. Pero si en los próximos días resultan un poco decepcionantes, la línea vuelve a doblarse hacia arriba. En resumen, el comercio se fija actualmente más en el clima que en las cifras. En París, los precios del trigo se mantuvieron bastante estables la semana pasada.