Cómo tomar mejores decisiones sobre las micotoxinas en las explotaciones lecheras

Las turbulencias meteorológicas, incluidas las fuertes lluvias, suscitan la preocupación de que las condiciones de los cultivos se vean comprometidas y de que se produzcan problemas de micotoxinas a lo largo del año. Las micotoxinas pueden afectar negativamente al rendimiento y la salud del ganado lechero y causar graves problemas económicos

El impacto económico se produce a través de los costes directos de mercado asociados a la pérdida de comercio o a la reducción de los ingresos debido al rechazo de los productos animales contaminados, a la reducción de la productividad, a la muerte de los animales (especialmente de los terneros, que son más sensibles) y al aumento del coste del tratamiento y de la mitigación de las micotoxinas. Por lo tanto, los productores lácteos necesitan comprender el panorama de las micotoxinas en su región y obtener una visión precisa para tomar decisiones informadas y gestionar el riesgo de micotoxinas de manera eficaz

¿Por qué son importantes las micotoxinas?

Las micotoxinas son metabolitos secundarios tóxicos producidos por hongos que causan micotoxicosis en los animales expuestos. La exposición a las micotoxinas suele producirse por el consumo de piensos contaminados y por contacto o inhalación. Los hongos que pueden producir micotoxinas crecen en numerosos alimentos como los cereales, los frutos secos y las especias

El crecimiento de los hongos puede producirse antes o después de la cosecha, y durante el almacenamiento en condiciones cálidas, húmedas y de humedad. La mayoría de las micotoxinas son químicamente estables y sobreviven al procesamiento de los alimentos. Tras consumir alimentos contaminados, los animales muestran una serie de signos clínicos que difieren entre las vacas en lactación, las novillas y los terneros

Se han identificado varias micotoxinas diferentes, pero las más observadas que suponen una preocupación para la salud del ganado lechero son las aflatoxinas, el deoxinivalenol, las fumonisinas, la ocratoxina A, la zearalenona, la toxina T-2, los tricotecenos de tipo B y los alcaloides del cornezuelo

Minimizar el riesgo de las micotoxinas

La contaminación de los piensos con micotoxinas es un problema persistente que afecta a la seguridad alimentaria, el rendimiento y la salud del ganado lechero. Existen dos estrategias para reducir el impacto negativo de las micotoxinas en la industria láctea:

  1. Los enfoques previos a la cosecha, como la obtención de cultivares resistentes, el uso de control químico de microorganismos y la gestión de los factores de estrés de las plantas, tienen como objetivo prevenir la contaminación fúngica en el campo
  2. Los enfoques posteriores a la cosecha, como el control de la temperatura y la humedad, el tratamiento en atmósfera modificada, el tratamiento térmico, el tratamiento ácido y/o alcalino y el control mediante agentes químicos antifúngicos, se aplican a los productos cosechados durante la cosecha, el procesamiento y el almacenamiento para prevenir, reducir o eliminar la contaminación por micotoxinas

¿Cómo tomar decisiones con conocimiento de causa?

Es necesario analizar muestras de la ración mixta total para cuantificar el riesgo de micotoxinas en cada región. Para los productores de leche, las micotoxinas como los tricotecenos de tipo B, la zearalenona y el deoxinivalenol son las que más problemas pueden causar, como el compromiso de la ingesta de materia seca, la producción de leche, la digestión, la reproducción, la salud intestinal y la respuesta inmunitaria, porque pueden producirse efectos sinérgicos entre los tricotecenos de tipo B y la zearalenona, y las micotoxinas múltiples pueden presentar problemas adicionales

El análisis rutinario de la ración mixta total es la mejor manera de identificar las concentraciones de micotoxinas específicas en los piensos y de gestionar el riesgo individual de micotoxicosis

Tomar una decisión informada

En conclusión, las micotoxinas están presentes en los piensos y afectan al rendimiento y la salud del ganado lechero de muchas maneras. Los enfoques previos y posteriores a la cosecha son dos estrategias para reducir el impacto negativo de las micotoxinas en la industria láctea. Sin embargo, la mayoría de estos enfoques tienen limitaciones en cuanto a la especificidad de los hongos y las matrices alimentarias

Se recomienda realizar pruebas rutinarias de la ración mixta total para identificar las concentraciones de micotoxinas específicas en los piensos, para obtener una visión precisa de las micotoxinas y para tomar decisiones informadas sobre la gestión del riesgo individual