Las medidas preventivas, como el control de calidad de los piensos o el uso de captadores de micotoxinas, pueden ser el mejor enfoque para minimizar los efectos negativos de las micotoxinas.
Cuando se trata de la contaminación por micotoxinas, el primer problema es diagnosticar y averiguar el nivel de contaminación original del pienso/grano. Desgraciadamente, no siempre es posible identificar las micotoxinas que causaron los diferentes síntomas o lesiones. En los casos de baja contaminación, la cuestión se vuelve aún más difícil porque a menudo los síntomas en los animales no son concluyentes. Existen numerosas razones por las que la exposición a las micotoxinas no puede reconfirmarse analizando al azar la fuente, es decir, el pienso:
Muestreo
Las micotoxinas no se distribuyen uniformemente. La razón principal es que los hongos no crecen en todas partes, sino sólo en lugares específicos también llamados «puntos calientes». Si no se siguen los procedimientos de muestreo adecuados, es probable que los resultados analíticos subestimen la contaminación por micotoxinas. Se calcula que una muestra representativa correcta para el análisis de micotoxinas requeriría una muestra inicial de más de 20 kg por cada 100 toneladas de pienso/grano. Se estima que más del 97% de los errores en la obtención de resultados correctos del contenido de micotoxinas provienen únicamente de errores de muestreo.
Técnicas de laboratorio
Los resultados pueden variar según el tipo de prueba. La HPLC tiene una mayor sensibilidad que la ELISA. Se están desarrollando técnicas cada vez mejores. Normalmente no es una fuente de error.
Micotoxinas conjugadas o enmascaradas
Las micotoxinas se adhieren a otros nutrientes, como azúcares (glucosa), ácidos grasos o aminoácidos, creando complejos que las pruebas convencionales no detectan. Las micotoxinas conjugadas se hidrolizan dentro del huésped (animales) y se liberan. Se estima que las micotoxinas conjugadas pueden representar hasta el 60% del contenido total de micotoxinas.
Otros métodos indirectos que no se basan en el análisis directo de los alimentos son:
Histopatología
Este método permite identificar lesiones características en los órganos diana causadas por micotoxinas específicas. Es bueno para el diagnóstico, pero la correlación con la contaminación original sólo puede establecerse en niveles relativos: baja, alta exposición, pero no con un valor numérico.
Identificación de marcadores o metabolitos de micotoxinas
Técnica basada en la identificación de marcadores o metabolitos en los tejidos corporales, y para establecer una correlación entre los niveles de los marcadores y la contaminación/exposición original
Lo ideal es que el metabolito/marcador tenga dos características:
- La muestra puede obtenerse sin sacrificar a los animales. Principalmente por el bienestar de los animales y porque, en situaciones de baja contaminación por micotoxinas, la principal preocupación es simplemente la pérdida de productividad.
- Debe haber una fuerte correlación entre los niveles detectados del marcador/metabolito en el fluido/tejido y la contaminación original en el alimento
Algunos ejemplos son:
Proporciones de esfingosina y esfinganina en sangre, asociadas a la exposición a la Fumonisina. Normalmente se utiliza para comparar grupos de animales expuestos y no expuestos, no para determinar la contaminación original.
Aflatoxina M1 en la leche de vaca, un marcador de aflatoxina B1 y B2. Esta sustancia está regulada en varios países y se han establecido límites legales. Sirve para determinar la contaminación original en función del nivel del marcador/metabolito.
Niveles de metabolitos en los fluidos/tejidos corporales. Varias micotoxinas y sus metabolitos pueden analizarse en sangre y existe una fuerte correlación con la contaminación original del alimento. El principal problema es que los niveles en sangre se ven fuertemente afectados por el momento de la toma de muestras después de comer. Por lo tanto, hay que tener en cuenta el momento de la toma de muestras cuando se intenta calcular la contaminación original del alimento. Otros ejemplos son el contenido de metabolitos en la bilis, que permanece más constante a lo largo del tiempo que los niveles en sangre.
¿Cuál es el mejor enfoque?
Es difícil determinar la contaminación real por micotoxinas analizando los parámetros antes o después de la exposición del animal. Por otro lado, no hay duda de los efectos perjudiciales de la exposición a las micotoxinas, por lo que el mejor enfoque es tomar medidas preventivas como el control de calidad de los piensos y el uso de captadores de micotoxinas.