El Comisario de Salud y Seguridad Alimentaria de la UE, Vytenis Andriukaitis, y el Director General de la FAO, José Graziano da Silva, acordaron aumentar la colaboración entre las dos organizaciones para abordar los residuos de alimentos, la seguridad alimentaria y la resistencia a los antimicrobianos en las cadenas de suministro.
En una nueva carta de intención firmada el 29 de septiembre de 2017, la FAO y la UE se comprometen a colaborar estrechamente para reducir a la mitad los residuos de alimentos per cápita para 2030, una meta establecida en el marco del nuevo programa mundial de los Objetivos de Desarrollo Sostenible. También se comprometen a intensificar la cooperación para hacer frente a la propagación de la resistencia a los antimicrobianos en las explotaciones agrícolas y en los sistemas alimentarios.
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La RAM: una amenaza creciente
A nivel mundial, un tercio de todos los productos alimenticios para el consumo humano – 1.300 millones de toneladas – se pierde o se desperdicia, cada año, causando enormes pérdidas financieras mientras se despilfarran recursos naturales. Sólo en Europa, se desperdician alrededor de 88 millones de toneladas de alimentos cada año, con costos asociados estimados en 143.000 millones de euros, según estimaciones de la UE. Mientras tanto, el aumento del uso -y el abuso- de los medicamentos antimicrobianos en la atención sanitaria tanto humana como animal ha contribuido al aumento del número de microbios causantes de enfermedades que son resistentes a los medicamentos antimicrobianos utilizados para tratarlas, como los antibióticos. Esto hace que la RAM sea una amenaza creciente que podría provocar hasta 10 millones de muertes al año y más de 100 millones de dólares en pérdidas para la economía mundial para 2050, según algunos estudios. Además de los riesgos para la salud pública, la RAM tiene implicaciones para la seguridad alimentaria, así como para el bienestar económico de millones de hogares agrícolas en todo el mundo.
Aliados naturales
La asociación reforzada de hoy refleja la intersección de las prioridades de la FAO y la UE en el ámbito de la seguridad alimentaria y la inocuidad de los alimentos. La FAO encabeza un esfuerzo internacional para mejorar la medición mundial de la pérdida y el desperdicio de alimentos, incluida la publicación de un índice anual de pérdida de alimentos a nivel mundial; la Comisión Europea también está trabajando en la elaboración de una metodología para medir el desperdicio de alimentos como parte de su «Plan de Acción para la Economía Circular». La FAO ya es un miembro activo de la Plataforma de la Unión Europea sobre pérdidas y desechos de alimentos. En junio, la Comisión de la UE aprobó un nuevo Plan de Acción de la UE sobre la RAM, respaldado por un enfoque de salud único y plenamente acorde con el Plan de Acción Mundial de la OMS sobre la RAM y el Plan de Acción de la FAO sobre la RAM 2016-2020, que se centra específicamente en abordar el problema dentro de las cadenas alimentarias.
