Los investigadores de Egipto examinaron el efecto del ácido fórmico y el diformato de potasio en el rendimiento, la inmunidad y la salud intestinal de los pollos de engorde.
Se han utilizado acidificantes como ácidos orgánicos puros como conservantes de los alimentos para protegerlos de la destrucción microbiana y fúngica. También se sabe que los ácidos orgánicos suprimen el crecimiento de las bacterias de intolerancia al ácido como E-coli, Salmonella spp. y Clostridium perfringens y su capacidad para reducir el pH en el estómago, lo que mejora la actividad de la pepsina y aumenta la digestibilidad del nitrógeno, el fósforo y los minerales.
Para investigar más a fondo el potencial de ciertos ácidos orgánicos para mejorar la salud intestinal y, por lo tanto, servir como alternativa a los antibióticos, se llevó a cabo un estudio en la granja de investigación avícola de la facultad de medicina veterinaria de la Universidad de El Cairo. En este estudio, publicado en el Journal Animal Nutrition, se dividieron 360 pollitos de un día de edad en 3 grupos con 3 réplicas de 40 pollitos cada uno. El ensayo continuó durante 35 días.
- El grupo de control fue alimentado sólo con una dieta basal (G1).
- El grupo 2 (G2) fue alimentado con una dieta basal complementada con ácido fórmico (FA) (5 g/kg de dieta).
- El grupo 3 (G3) recibió una dieta basal suplementada con diformato de potasio (KDF) (5 g/kg de dieta).
Los resultados muestran que la suplementación de FA, independientemente de la forma, tuvo un efecto beneficioso sobre el rendimiento y la inmunidad de los pollos de engorde sin tener efectos significativos sobre los parámetros bioquímicos de la sangre. Además, la FA es eficaz contra las especies intolerantes a los ácidos como E. coli, Salmonella y Clostridium en el ciego. Sin embargo, el KDF es más efectivo que el FA ya que poca cantidad de FA llega al intestino delgado debido al metabolismo y la absorción. Mientras que el KDF permite que una proporción de FA pase intacta a través del tracto digestivo superior y entre en el intestino delgado.
Se puede acceder al estudio completo aquí.