El trigo ruso ha seguido principalmente la dinámica descendente del mercado mundial, derivada de la disminución de la demanda. El precio medio de exportación del trigo francés con un contenido proteínico del 11%, por ejemplo, ha alcanzado recientemente los 224 dólares por tonelada FOB, 21 dólares menos que en los primeros días del año, informó SovEcon.

Durante los últimos 12 meses, el mercado mundial de cereales ha registrado una caída del 25% en los precios del trigo ruso, del 32% en el francés y del 24% en el estadounidense, según estimaciones de la Unión Rusa de Cereales.

Dmitry Rylko, director general del Instituto de Estudios de Mercados Agrícolas IKAR, una consultora con sede en Moscú, afirmó que los momentos de caída tan profunda de los precios, como en las últimas semanas, suelen ir acompañados de una falta de nuevos contratos. De momento, no se dan las condiciones necesarias para que se invierta la tendencia bajista, declaró Rylko a la publicación local Agroinvestor.

Sin descuento para las exportaciones rusas

Desde enero de 2024, los exportadores rusos de cereales han conseguido librarse de un descuento, con el que tenían que ofrecer sus productos a algunos clientes extranjeros para firmar nuevos contratos. El descuento, atribuido principalmente a los riesgos políticos y logísticos de tratar con suministros rusos, ha estado lastrando las operaciones de exportación desde principios de 2022, según la Unión Rusa de Cereales.

Además, según se informa, el gobierno ruso ha bajado los precios mínimos de exportación. En los últimos meses, algunos exportadores rusos de cereales se han quejado de las dificultades para ganar licitaciones para el suministro de trigo en el norte de África, debido a la regulación estatal de los precios de exportación.

Problemas en el oleoducto

Los exportadores rusos de cereales se enfrentarán a ciertos problemas debido a la reciente caída de los precios mundiales, según declaró a Agroinvestor Vladimir Petrichenko, Director General de ProZerno, una empresa de análisis con sede en Moscú.

«Los precios internos tienden a bajar, pero no tan rápido como los del mercado mundial. Esto significa que los exportadores se enfrentarán a dificultades a la hora de comprar grano para cumplir sus contratos. También hay que tener en cuenta que a principios de febrero [los exportadores rusos] tenían grandes reservas de grano relativamente caro en comparación con el precio mundial», señaló Petrichenko.

Según Petrichenko, este hecho también podría añadir presión al negocio de los exportadores rusos de grano.