La salud intestinal es un foco primordial para todas las especies. Las intervenciones suelen comenzar a nivel individual a través de la alimentación justo antes de los períodos difíciles, como el destete de los lechones, por ejemplo. Una forma más rentable de mantener la salud intestinal podría ser a través de la madre.
Un enfoque holístico combina conceptos nutricionales modernos y productos que permiten la salud intestinal para apoyar la producción sin antibióticos. Por lo tanto, las dietas bajas en proteínas, en combinación con los probióticos, tienen un papel que desempeñar en el apoyo al rendimiento de los cerdos y las aves de corral.
Las algas marinas contienen «polisacáridos sulfatados», componentes que no se encuentran en las plantas, la levadura o las microalgas. Sin embargo, los animales reaccionan bien a ellos. Combinando polisacáridos sulfatados de algas verdes y rojas, una nueva estrategia ha visto la luz que puede ayudar a los cerdos destetados en programas sin antibióticos.
Los probióticos pueden tener un efecto positivo en la barrera epitelial intestinal y en la función inmunológica. La investigación china examinó más de cerca y evaluó los efectos de una cepa de bacilo probiótico, originalmente aislada del suelo, y cómo puede beneficiar a los lechones.
El rápido avance de las tecnologías de secuenciación de genes ha permitido recientemente investigar una serie de cuestiones relacionadas con los antibióticos.
La industria del huevo se enfrenta a la presión de los consumidores por el bienestar de los animales utilizados para la alimentación. Pero en términos de eficiencia económica o sostenibilidad (agricultura sostenible), el bienestar de los animales es sólo un aspecto que debe ser considerado. La salud animal, los aspectos sociales, los factores ambientales y económicos también deben incluirse para evaluar la sostenibilidad general de los diversos sistemas de producción de huevos. Cada sistema tiene sus propios desafíos, pero ningún sistema de alojamiento es ideal desde el punto de vista del bienestar de las gallinas.
La levadura y las fracciones de levadura han sido identificadas como alternativas seguras y eficientes a los antibióticos por la ANSES*, la Agencia Francesa para la Alimentación, el Medio Ambiente y la Salud y Seguridad Ocupacional.
Los aditivos fitogénicos para piensos (PFAs) son utilizados principalmente por la industria de los piensos por su efecto antimicrobiano y de mejora de la digestibilidad. El uso de estos productos parece ser muy elevado en la región de Asia y el Pacífico.
La Lawsonia intracelularis, agente causante de la ileítis del cerdo (IP), es uno de los patógenos de mayor importancia económica en la producción porcina de todo el mundo. Las pérdidas económicas se estiman entre 0,50 y 1,00 euros por cada cerdo en crecimiento afectado (McOrist, 2005).
La fitogenética puede ofrecer una herramienta muy valiosa para los nutricionistas que diseñan estrategias para reducir la necesidad de antibióticos promotores del crecimiento en la producción de proteínas animales. Sin embargo, existe la necesidad de validar biomarcadores fiables para medir la eficacia y la seguridad de los fitogénicos. Aquí una visión científica y comercial de los progresos realizados hasta ahora.
