La resistencia de los cultivos, la nutrición y la salud, así como la seguridad alimentaria, se verán beneficiadas gracias a una inversión total de 60 millones de libras en los próximos 5 años para el principal centro de investigación de cultivos del Reino Unido.
El Consejo de Investigación en Biotecnología y Ciencias Biológicas (BBSRC) ha concedido a Rothamsted Research, en Hertfordshire, este paquete que le permitirá mejorar su capacidad de ofrecer una investigación puntera a escala mundial.
La profesora Angela Karp, directora ejecutiva de Rothamsted Research, declaró que la financiación mejorará significativamente la capacidad del Instituto para llevar a cabo una investigación puntera a nivel mundial: «Esta inversión del BBSRC es una auténtica muestra de confianza en Rothamsted y en nuestra capacidad para aportar soluciones a algunos de los mayores retos a los que se enfrenta la sociedad».
El profesor Karp dijo que en los últimos años, la investigación de Rothamsted había:
– Ayudó a preparar el terreno para el pan blanco rico en fibra.
– Ampollas de suelo terminadas en todos los campos de África posibles.
– Dirigió el primer ensayo europeo de un trigo con genoma editado que ayuda a combatir el cáncer.
– Ayudó a encontrar formas de reducir las emisiones asociadas al pastoreo de ganado.
– Identificación de tendencias medioambientales, como la disminución de insectos.
– Descubrimos cómo y por qué el carbono es tan importante para unos suelos sanos que ayuden a combatir el cambio climático.
«Ahora esperamos avances aún mayores en los próximos 5 años, mientras nos preparamos para los grandes retos que nos aguardan: la población mundial crece, sus recursos menguan y no habrá lugares donde esconderse de los estragos del cambio climático.
«Ya se trate de cultivos resistentes a la sequía o de plantas modificadas genéticamente para que actúen como minifábricas, nuestros investigadores buscan urgentemente soluciones que garanticen el suministro mundial de alimentos en las próximas décadas.
«Y, por supuesto, la base de todo esto es el imperativo de cultivar alimentos en armonía con el mundo, combatiendo las plagas y enfermedades sin utilizar pesticidas, manteniendo el rendimiento sin emplear fertilizantes artificiales y reclutando aliados, desde árboles a insectos, para ayudar a nuestros sistemas agrícolas».
Desactivar el impacto negativo de los retos climáticos
Su investigación más reciente, realizada en colaboración con la Universidad de Reading y la Universidad de Newcastle, concluye que el impacto negativo de la variabilidad climática sobre la seguridad alimentaria y los ingresos agrícolas podría compensarse si los agricultores cultivaran una gama más amplia de productos y utilizaran pesticidas y fertilizantes de forma más eficiente.
El informe también constata que, en algunas explotaciones, las subvenciones públicas vinculadas a la gestión medioambiental contribuyen a estabilizar los ingresos y la producción de alimentos, en comparación con los regímenes que se limitan a pagar a los agricultores por la cantidad de tierra que cultivan.
La financiación de Rothamsted forma parte de un paquete global de 376 millones de libras del BBSRC dirigido por institutos especializados de todo el Reino Unido