En un ensayo reciente, se demostró que la suplementación de té verde descafeinado en la dieta mejoraba el estado antioxidante y los títulos inmunológicos de los pollos de engorde.
El estrés oxidativo constituye un importante mecanismo químico que provoca daños biológicos, que a su vez pueden afectar al crecimiento y la producción de los animales de granja. Los pollos de engorde suelen estar expuestos a una serie de factores de estrés, como el transporte, la malnutrición, el desafío de las enfermedades y el hacinamiento. Se sabe que esos factores de estrés aumentan la producción de especies reactivas de oxígeno (ROS), que se cree que afectan negativamente al rendimiento del crecimiento, disminuyen la respuesta inmunológica, aumentan la peroxidación de los lípidos y reducen la calidad de la carne. Los antioxidantes sintéticos como la etoxiquina, el BHA (butilhidroxianisol) y el BHT (butilhidroxitolueno) se utilizan comúnmente como aditivos técnicos eficaces en las dietas de las aves de corral a fin de aumentar la estabilidad del alimento. No obstante, se cree que esas sustancias tienen efectos biológicos in vivo, y su seguridad toxicológica es objeto de gran debate. Esto ha impulsado la búsqueda de compuestos naturales que puedan sustituir a los antioxidantes sintéticos en los piensos, en particular los que proporcionan beneficios zootécnicos adicionales.
El té verde (Camellia sinensis) se considera una valiosa fuente de antioxidantes naturales. Los principales flavan-3-oles presentes en el té verde incluyen la catequina, la epicatequina, la galocatequina, la epigalocatequina, el galato de galocatequina, el galato de epicatequina y el galato de epigalocatequina. El galato de epigalocatequina, uno de los principales componentes polifenólicos del té verde, posee la mayor capacidad antioxidante entre los flavan-3-oles que se encuentran en el té verde (figura 1). Además, se cree que los polifenoles que se encuentran en los extractos de té verde proporcionan beneficios para la salud más allá de los mecanismos antioxidantes. Por ejemplo, se cree que los polifenoles del té verde interactúan con las proteínas y los fosfolípidos de la membrana plasmática, regulando las vías de transducción de señales, los factores de transcripción, la metilación del ADN, la función mitocondrial y la autofagia.
Estudio para explorar los efectos en los pollos de engorde
Se realizó un ensayo para estudiar el efecto de la alimentación con concentraciones graduadas de extracto de té verde descafeinado (GTE; 125, 250, 500, 1000 y 2000 ppm) en el rendimiento del crecimiento, el perfil lipídico sérico, el estado antioxidante (niveles reducidos de glutatión en el hígado y malondialdehído en el músculo del muslo) y la respuesta inmunológica humoral contra las vacunas del virus de la enfermedad de Newcastle de los pollos de engorde desde la eclosión hasta los 42 días de edad.
El ensayo, de 42 días de duración, se llevó a cabo en la Unidad de Investigación Animal de la Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Zagazig (Egipto). En un diseño aleatorio completo, se asignaron 252 pollitos de un día de edad sin sexo (Ross 308) a siete tratamientos dietéticos. Cada tratamiento se subdividió en seis réplicas de seis aves cada una. Los resultados de los pollos de engorde alimentados con GTE se contrastaron con los de los alimentados con butilhidroxitolueno (BHT; 125 ppm) o con el control sin suplemento. Se calcularon los parámetros de rendimiento de crecimiento para cada período de cría, incluida la ganancia media diaria (ADG), la ingesta media diaria de alimentos (ADFI) y la relación de conversión alimentaria (FCR). Las dietas utilizadas en este ensayo se basaron en el maíz, la harina de soja y la harina de gluten de maíz, y se ajustaron en un programa de alimentación de tres fases (iniciador, 0-21 d; cultivador, 22-35 d; finalizador, 36-42 d). Las dietas eran en forma de puré, se ofrecían ad libitum y no contenían medicamentos antimicrobianos sintéticos.
Aumento del antioxidante
La inclusión del extracto de té verde descafeinado (GTE) y el hidroxitolueno butilado (BHT) en las dietas experimentales no afectó significativamente los parámetros de rendimiento de crecimiento medidos (BW, ADG, ADFI y FCR) a lo largo de los períodos experimentales. No obstante, se observó una tendencia lineal en la FCR en las dietas que contenían una cantidad creciente de GTE. No hubo diferencias significativas en los parámetros de lípidos séricos medidos entre los pollos de engorde alimentados con la dieta de control o las dietas suplementadas con GTE o BHT.
Figura 1 – Estructura química del galato de epigalocatequina, un poderoso antioxidante que se encuentra en el té verde.
El glutatión reducido es uno de los antioxidantes no enzimáticos más importantes dentro de las células vivas, y su nivel puede utilizarse como indicador del estado antioxidante de los tejidos. Se observó una mejora positiva en el nivel reducido de glutatión en los pollos de engorde alimentados con las dietas suplementarias de GTE en comparación con los alimentados con la dieta de control. El mejor valor se observó en los pollos de engorde alimentados con una dieta suplementada con 500 ppm de GTE, en la que el nivel reducido de glutatión fue un 55,5% mayor que el de los alimentados con la dieta de control. El valor reducido de glutatión de los pollos de engorde alimentados con una dieta suplementaria de BHT no fue significativamente diferente de los alimentados con las dietas de control o suplementadas con GTE.
Los niveles de malondialdehído en el tejido se consideran un indicador adecuado del estrés oxidativo y la peroxidación de lípidos. La ingesta dietética de GTE o BHT redujo significativamente el nivel de malondialdehído del tejido muscular del muslo en niveles de hasta el 42,5% en comparación con el control. El nivel de malondialdehído no fue significativamente diferente entre los pollos alimentados con dietas suplementadas con BHT o GTE. Se observó un efecto lineal en el nivel de malondialdehído en las dietas que contenían una cantidad creciente de GTE.
Apoyo inmunológico
La alimentación de pollos de engorde con dietas complementadas con GTE dio lugar a un aumento significativo del título de anticuerpos contra las vacunas contra el virus de la enfermedad de Newcastle en niveles de hasta el 60% (a los 28 días de edad) y el 112% (a los 35 días de edad) en comparación con los alimentados con la dieta de control. Las mejores respuestas se observaron en los pollos de engorde alimentados con dietas que contenían 125 y 500 ppm de GTE respectivamente. La ingesta dietética de BHT no dio lugar a una diferencia significativa en el título de anticuerpos en comparación con los alimentados con las dietas de control o con suplementos de GTE.
Conclusión
Este estudio destacó las propiedades antioxidantes e inmunoestimulantes del extracto de té verde descafeinado en los pollos de engorde cuando se utiliza como suplemento alimenticio. La incorporación de GTE en el alimento a niveles que oscilaban entre 125 y 500 ppm mostró una mejora significativa en el estado antioxidante de la carne, como se demostró por un mayor nivel de glutatión-reducido en el tejido hepático y un menor nivel de malondialdehído en el tejido cárnico. Las propiedades antioxidantes del té verde se atribuyen a su contenido de polifenoles, que eliminan los radicales libres y, por consiguiente, proporcionan protección celular y retrasan o inhiben la aparición de la peroxidación lipídica. También se demostró que la suplementación con té verde mejora la respuesta inmunológica y la potencia de la vacunación en los pollos de engorde. Además, los parámetros de rendimiento del crecimiento no se vieron afectados negativamente.
Fuente: Efecto de complementar las dietas de los pollos de engorde con extracto de té verde en el rendimiento del crecimiento, el perfil de lípidos, el estado antioxidante y la respuesta inmunológica. M. Farahat, F. Abdallah, T. Abdel-Hamid, y A. Hernandez-Santana, British Poultry Science, 57; 5, 2016.
