La producción animal en condiciones de calor es un reto importante en muchas regiones y se prevé que se generalice en el futuro. Durante el estrés térmico, se utilizan varias estrategias de adaptación para disipar el exceso de calor. En primer lugar, cuando las temperaturas son elevadas, aumenta el consumo de agua y disminuye la ingesta de alimento (lo que reduce la absorción de nutrientes). En segundo lugar, en el intento de disipar el calor, el ganado aumenta la frecuencia cardíaca y respiratoria. El metabolismo se ve gravemente afectado, lo que a menudo provoca estrés oxidativo.

Mejorar el estado de los antioxidantes

Durante las condiciones de estrés térmico se ha demostrado que complementar la dieta con antioxidantes puede ayudar a prevenir cualquier efecto perjudicial. A nivel celular, los cambios metabólicos que se producen durante el estrés térmico inducen una sobreproducción de radicales libres; la célula necesita estar protegida por antioxidantes para contrarrestarlo. El selenio desempeña un papel clave en la defensa antioxidante; sin embargo, la forma del selenio es importante. OH-SeMet tiene un alto nivel de biodisponibilidad y regula selenoproteínas específicas. Durante el estrés térmico, la administración de suplementos de OH-SeMet puede aumentar el estado antioxidante, la inmunidad celular y el almacenamiento de selenio en los tejidos, en mayor medida que otras formas de selenio.

Apoyo al metabolismo

La metionina es un aminoácido esencial para la síntesis de proteínas y sus metabolitos posteriores participan activamente en las defensas antioxidantes. Se ha demostrado que la metionina en forma de HMTBA es más eficaz que otras fuentes durante el estrés térmico. Ya que es un mejor proveedor de cisteína, glutatión y taurina que la L-Met o la DL-Met. El HMTBA ayuda a proteger el músculo reduciendo la influencia negativa del estrés térmico sobre el crecimiento y la calidad de la carne. El estrés térmico provoca un aumento de la cantidad de grasa a expensas del tejido magro, debido a su efecto sobre la distribución de nutrientes. Se ha demostrado que la suplementación con HMTBA tiene un impacto positivo en el rendimiento, el estrés oxidativo y la lipogénesis.

Optimización de la ingesta de alimentos

Uno de los principales efectos del estrés térmico es la reducción de la ingesta de pienso, y las cerdas se ven especialmente afectadas por las deficiencias nutricionales. Si se utiliza un potenciador de la palatabilidad, se puede mejorar tanto la ingesta media diaria de alimento de la cerda como la tasa de crecimiento de sus lechones. La optimización del ADFI permite a las cerdas llevar los nutrientes y la energía a la glándula mamaria, maximizando la producción de leche para sus camadas. Como resultado, los lechones muestran un mejor crecimiento, con camadas más grandes y pesadas destetadas. Los rumiantes también se benefician de los potenciadores de la palatabilidad durante el estrés térmico, de la misma manera.

SOLUCIONES PARA RUMIANTES

El ganado tiene dificultades para disipar eficazmente su carga de calor, ya que no suda y depende de la respiración para enfriarse. El proceso de fermentación que tiene lugar en el rumen genera un calor adicional que se acumula durante el día y que se disipa por la noche, cuando el ambiente es más fresco. Cuando el ambiente nocturno no es lo suficientemente fresco, el animal acumula un calor que no puede liberar, lo que provoca estrés térmico. El estrés térmico afecta a la salud y el bienestar de los rebaños, así como al rendimiento, lo que provoca pérdidas económicas. Las altas temperaturas tienen un efecto directo y negativo en la producción de leche, debido a la disminución del consumo de alimento. Los ensayos realizados con el potenciador de la palatabilidad Gusti Plus han registrado un aumento de la ingesta de materia seca y de la producción diaria de leche. En un ensayo en el que se comparó el rendimiento del ganado lechero sometido a estrés térmico y suplementado con OH-SeMet (Selisseo) o selenita sódica (SS), la producción de leche tendió a ser mayor en las vacas alimentadas con OH-Se Met(Figura 1).

SOLUCIONES AVÍCOLAS

El estrés térmico tiene efectos negativos en la producción de pollos de engorde en términos de ADG, eficiencia alimentaria, habitabilidad, rendimiento y calidad de la carne. En el caso de las gallinas ponedoras, también se reducen la producción y la calidad de los huevos, mientras que en las aves reproductoras se ven afectadas la fertilidad y la incubabilidad. La metionina en forma de HMTBA, gracias a su mayor potencial de transulfuración y a la producción de glutatión, mejora el estado redox y complementa las propiedades antioxidantes del OH-SeMet, ayudando a las aves de corral a afrontar mejor el estrés térmico.

Pruebas en pollos de engorde

El efecto de la suplementación con OH-SeMet sobre el rendimiento del crecimiento de los pollos de engorde expuestos al estrés térmico se ha evaluado en varios ensayos en los que se utilizaron diferentes genéticas de pollos de engorde y bajo diversas condiciones de estrés térmico. En esos ensayos, en comparación con el selenito de sodio, OH-SeMet mejoró el estado antioxidante de las aves, lo que se tradujo en una mejora media de unos 30 g de peso corporal final, una disminución del 2% en la FCR y unos 2 puntos menos en la tasa de mortalidad. En un ensayo realizado en Tailandia se observó una mejora en la FCR de los pollos de engorde alimentados con HMTBA (Rhodimet). Los investigadores de Brasil observaron una mejora numérica del peso corporal (+63 g) y una reducción significativa de la tasa de mortalidad (0,9 puntos) en los pollos alimentados con HMTBA(Figura 2).

Figura 2 – El HMTBA mejoró la ganancia de peso corporal de los pollos de engorde y el FCR en condiciones de calor en Brasil.

SOLUCIONES PARA EL SECTOR PORCINO

El aumento de la palatabilidad de las dietas mejora el rendimiento de las cerdas y optimiza el valor de las dietas de lactación. La aplicación de un potenciador de la palatabilidad (PE) (Krave), en condiciones de clima tropical, a 500 g/t, aumentó el ADFI en un 29% en comparación con el grupo de control y en un 9,6% en comparación con el PE a 250 g/t(Figura 3). Las cerdas alimentadas con el nivel de inclusión más alto tuvieron una mayor producción media diaria de leche, un 11% y un 51% mayor respectivamente, en comparación con el nivel más bajo o el grupo de control negativo. Estas mejoras se tradujeron en una mayor ganancia diaria de peso de la camada y en el tamaño de la camada al destete. La ganancia diaria de peso de la camada de las cerdas alimentadas con 500 g/t de PE fue un 23% y un 31% mayor en comparación con los grupos de 250 g/t y de control negativo, respectivamente. Esta observación es consecuencia del aumento de la ADFI de las cerdas y de la producción de leche, mejorando la ganancia de peso de los lechones. El nivel de metionina en la dieta también es un tema que merece la pena explorar en condiciones de calor. En los ensayos, los cerdos sometidos a estrés térmico alimentados con HMTBA tuvieron una mayor profundidad de lomo, en comparación con la DL-Met.

Ayuda para el estrés térmico

El uso de potenciadores de la palatabilidad para favorecer la ingesta de alimentos ayuda a garantizar el rendimiento del ganado y de sus crías. La capacidad antioxidante define la capacidad de un animal para soportar el estrés térmico. La suplementación de los animales con OH-SeMet, vitaminas E y C, contribuye a ello. Utilizando estrategias nutricionales complementarias, incluyendo HMTBA, el ganado es capaz de hacer frente a las consecuencias metabólicas no deseadas. De este modo se optimiza el crecimiento, la eficiencia, la fertilidad, la producción de leche, la inmunidad y la calidad de la carne y los huevos.

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