¿Cómo afectan las materias primas a la producción animal y pueden ayudar las enzimas?

Las enzimas exógenas, que se utilizan para mejorar el valor nutricional de los ingredientes de los piensos, son una solución eficaz para optimizar la eficiencia de los mismos.

Uno de los mayores retos a los que se enfrentan los productores de animales de granja es el aumento del coste de los piensos, que puede suponer hasta el 70% de los gastos totales de producción. Además, alrededor del 25% de los nutrientes disponibles en los piensos no pueden ser aprovechados plenamente por el animal debido a los factores antinutricionales de los mismos, aspectos que afectan negativamente a la nutrición. Además, la variabilidad y la disponibilidad de las materias primas también desempeñan un papel importante. El sector experimenta actualmente una fluctuación de los precios de los cereales. ¿En qué medida afectan estos cambios a la rentabilidad?

Un aumento de 10 dólares por tonelada de harina de soja podría representar un incremento de 0,44 dólares en el coste de producción de una docena de huevos, o un aumento de 0,25 dólares por libra de peso vivo en el coste de producción de pollos de engorde, lo que tiene un impacto significativo en la rentabilidad. Además, los factores antinutricionales y la variabilidad de las materias primas también pueden afectar a la digestibilidad y al rendimiento de los animales, y pueden repercutir en la huella medioambiental de la explotación, ya que si no se optimiza la utilización de los nutrientes de la dieta, se podrían volver a excretar más nutrientes al medio ambiente. Ahora, más que nunca, uno de los mayores retos de la industria de la nutrición animal es establecer una producción rentable y eficiente de carne y huevos basada en factores nutricionales y económicos, que a menudo varían y pueden ser únicos para cada sistema de producción.

Optimización de la utilización de los nutrientes

Los valores nutricionales de las materias primas utilizadas en la alimentación animal son muy variables. Por ejemplo, los ingredientes de origen vegetal incluyen cantidades significativas de polisacáridos no amiláceos (NSP), que contienen propiedades antinutricionales que aumentan la viscosidad de la dieta, limitando la ingesta de energía y la digestibilidad. Las fracciones no digeribles representan una pérdida para el productor y pueden variar en función de su origen

La industria de la nutrición animal siempre se ha centrado en optimizar la salud y el rendimiento mediante la utilización de los nutrientes. Los avances en este campo durante las últimas décadas han revelado diversas aplicaciones que pueden ayudar a liberar los nutrientes atrapados para satisfacer las necesidades nutricionales de los animales. Una de estas soluciones, y quizás la más importante y probada de todas, es el uso de enzimas exógenas

¿Cómo pueden ayudar las enzimas a la nutrición animal?

Las enzimas desempeñan un papel fundamental en el proceso digestivo del animal. Aunque las enzimas digestivas se producen dentro del propio animal, los productores han utilizado enzimas alimentarias exógenas para optimizar la utilización de los nutrientes y mejorar el rendimiento en términos de alimentación animal

Las enzimas exógenas se añaden habitualmente a las dietas de los animales para mejorar el valor nutritivo de los ingredientes de los piensos (especialmente el fósforo, el calcio, los aminoácidos y las proteínas)

  • para optimizar la salud de los animales
  • el bienestar y el rendimiento de los animales
  • aumentar la eficacia de la alimentación, y
  • reducir la excreción de nutrientes al medio ambiente, lo que en última instancia se traduce en una reducción sostenible de los costes de alimentación

Las enzimas para piensos también permiten utilizar una gama más amplia de productos alimenticios, lo que puede ayudar a aumentar la flexibilidad en la formulación de la dieta mediante el uso de fuentes no convencionales o materias primas alternativas. Las fuentes dietéticas no convencionales pueden utilizarse para reducir los costes de los piensos, pero pueden no ser tan fácilmente digeribles, ya que el animal puede carecer de las enzimas digestivas endógenas necesarias y, por lo tanto, obtendrá menos nutrientes del pienso

El uso de enzimas exógenas ayuda a que los piensos sean más digeribles y, en consecuencia, aumenta el valor nutricional de estas fuentes de alimentación no convencionales para la nutrición animal. En los últimos 20 años, la utilización de enzimas en los piensos ha evolucionado. A medida que las dietas de los piensos se han vuelto más complejas para combatir el aumento de los costes de los componentes tradicionales de los piensos, se han añadido enzimas con la expectativa de que maximicen la disponibilidad de nutrientes de los piensos y, por tanto, den lugar a una mejora del rendimiento de los animales. Sin embargo, las características de las enzimas pueden variar mucho en función de la cepa microbiana de la que procedan y de su producción

El uso de enzimas ha surgido como una importante contribución a la sostenibilidad de la producción animal. Foto: Alltech
El uso de enzimas ha surgido como una importante contribución a la sostenibilidad de la producción animal. Foto: Alltech

Un sistema de fermentación único

La mayor parte de la producción de enzimas para piensos tiene su origen en el uso de microorganismos bacterianos y fúngicos producidos a través de uno de los dos procesos: la fermentación sumergida (SmF) o la fermentación en estado sólido (SSF)

Alltech ha invertido en la tecnología SSF, que utiliza un organismo no modificado genéticamente -por lo general, un hongo- que crece en un alimento rico en fibra para producir una serie de enzimas naturales. El objetivo de la SSF es producir un complejo multienzimático que actúe sobre los numerosos sustratos de fibra de la dieta, y no sólo sobre uno o dos sustratos específicos, para reducir sus efectos antinutricionales. El uso de SSF para la producción comercial de enzimas se ha investigado ampliamente en los últimos 20 años. Los sistemas de SSF pueden adaptarse para satisfacer necesidades específicas en función de la selección microbiana y de los múltiples sustratos de las dietas. Por ejemplo, Aspergillus niger produce un producto multienzimático que contiene fitasa, proteasa, amilasa, xilanasa, celulasa y β-glucanasa. Alltech ha invertido en numerosos programas de doctorado establecidos para estudiar la tecnología de las enzimas a través de la FSS. Estos programas se han centrado en cómo mejorar la eficiencia de la producción en los sistemas de fermentación. Toda nuestra investigación examina la continuación de los organismos no modificados genéticamente para aportar tecnologías más sostenibles a la industria. El programa de gestión de enzimas de Alltech ofrece tecnologías únicas de enzimas para piensos respaldadas por la ciencia que trabajan en sinergia con el tracto digestivo del animal para optimizar el potencial del pienso. Allzyme SSF ayuda a maximizar la utilización y la eficiencia de los piensos al dirigirse a los multisubstratos de la dieta. Además, Allzyme Vegpro ofrece un complejo enzimático diseñado específicamente para fuentes de proteína vegetal, que ayuda a los animales a optimizar la digestibilidad y la utilización de los nutrientes, especialmente las proteínas

En los últimos dos años, hemos centrado nuestra investigación en mejorar aún más nuestra tecnología enzimática. Recientemente se han llevado a cabo ensayos con aves de corral y se están realizando más en todo el mundo. Creemos que estos nuevos desarrollos ofrecerán un mayor aprovechamiento de los nutrientes al mejorar la digestibilidad de los piensos, al tiempo que promoverán un mayor ahorro de costes.

En un futuro próximo, las enzimas serán la clave

Al examinar las opciones de alimentación, el uso de enzimas ha surgido como una contribución importante para establecer una solución para el aumento de la sostenibilidad de la producción animal. Nuestras tecnologías de enzimas para piensos tienen implicaciones que van más allá del ahorro de costes: nuestra gama de enzimas para piensos también ayuda a mejorar la salud intestinal y el bienestar de los animales, al tiempo que reduce el impacto medioambiental, lo que permite a los productores triplicar potencialmente sus resultados.