La autorización de la UE de los aditivos reductores de micotoxinas se ha convertido en una referencia de garantía de calidad reconocida internacionalmente. Para los ganaderos y las fábricas de piensos, los productos autorizados por la UE pueden evitar posibles escollos y proteger a los animales y los beneficios
Los piensos son parte integrante de la cadena alimentaria, ya que los alimentos que consume nuestro ganado acaban convirtiéndose en nutritivos huevos, leche o carne para el consumo humano. El enfoque «de la granja al tenedor» de la Unión Europea controla estrictamente lo que puede entrar en la alimentación animal para proteger el bienestar de los animales, la salud de los consumidores y el medio ambiente
Los aditivos para piensos se han convertido en una parte crucial de la dieta de los animales domésticos, y deben ser evaluados y registrados antes de que se autorice su venta en la UE. El primer paso hacia el registro es recibir la aprobación de la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA). Esta autorización depende de la evaluación objetiva del comité científico de la EFSA sobre la seguridad y eficacia de un aditivo.
2 ventajas principales de la autorización de la UE
Los productos registrados en la UE tienen dos ventajas demostrables: seguridad y eficacia. En primer lugar, la EFSA confirma que los productos son seguros para los animales, sus manipuladores y los consumidores finales. En segundo lugar, los productos registrados en la UE son eficaces. La EFSA valida las afirmaciones que los fabricantes de aditivos para piensos pueden hacer sobre sus productos en la UE, garantizando que el producto puede hacer realmente lo que dice el fabricante. Sólo se permite publicitar las afirmaciones respaldadas por investigaciones publicadas en revistas científicas revisadas por pares, de modo que los compradores -por ejemplo, las fábricas de piensos y los ganaderos- no sean engañados con promesas altisonantes o afirmaciones falsas.
Criterios para los desactivadores de micotoxinas
En 2009 se estableció un nuevo grupo funcional denominado «Sustancias para la reducción de la contaminación de los piensos por micotoxinas» dentro del Reglamento (CE) nº 1831/2003 de la Comisión Europea. Este grupo contiene las sustancias que pueden suprimir o reducir la absorción, promover la excreción o modificar el modo de acción de las micotoxinas en los animales
La Comisión Técnica de la EFSA sobre Aditivos y Productos o Sustancias utilizados en la Alimentación Animal (FEEDAP) exige información de cuatro categorías diferentes para obtener el registro dentro de este grupo funcional:
- Especificidad de la micotoxina: Debe declararse la(s) micotoxina(s) objetivo del producto
- Especificidad de la especie: Datos de al menos tres estudios in vivo realizados en un mínimo de dos lugares diferentes que muestren efectos estadísticamente significativos de su eficacia a la dosis más baja recomendada en una especie específica
- Biomarcadores: La demostración de la eficacia del producto debe aportarse en forma de biomarcadores relevantes científicamente reconocidos.
- Seguridad: En el caso de los captadores de micotoxinas deben presentarse datos que descarten las posibilidades de interacción con otros componentes de los piensos (como vitaminas, minerales, etc.). En el caso de los desactivadores de micotoxinas que modifican la estructura química de las micotoxinas, deben presentarse los efectos de la sustancia desactivadora, así como del metabolito o los metabolitos resultantes, sobre la seguridad de los animales destinatarios, el consumidor y el medio ambiente.
El certificado de calidad del sector
Los requisitos para el registro en la UE son estrictos. El número de publicaciones científicas requeridas y el nivel de colaboración con universidades y centros de investigación de gran confianza que se necesita para la aprobación de la EFSA, seguida de una autorización de la UE, han convertido el registro de la UE en un punto de referencia para la calidad de los productos en Europa y a nivel internacional.
Implicaciones en la explotación
Entre los posibles escollos que podrían encontrar los agricultores y los fabricantes de piensos al aplicar inhibidores de micotoxinas no registrados en la UE se encuentran:
- Ineficacia contra las micotoxinas en la granja: los animales quedan desprotegidos
- Incertidumbre sobre la seguridad para los animales o los seres humanos
- Disminución del valor nutricional de la ración: los aglutinantes inespecíficos pueden aglutinar toxinas, nutrientes y vitaminas
- Retorno de la inversión inexistente o negativo debido a los factores anteriores
Sin un plan adecuado de gestión del riesgo de micotoxinas que utilice aditivos inhibidores de micotoxinas científicamente probados, los agricultores y las fábricas de piensos podrían seguir viendo cómo las micotoxinas afectan negativamente a sus operaciones en forma de un menor rendimiento de los animales y un deterioro del estado de salud, además de una menor rentabilidad de la explotación. La aplicación de desactivadores de micotoxinas que cuenten con la plena autorización de la UE y con un sólido respaldo científico garantizaría que los agricultores y las fábricas de piensos evitaran estos escollos
La única marca con diferentes modos de acción registrada por la EFSA
Hasta la fecha, sólo 7 aditivos han sido registrados con éxito como «Sustancias para la reducción de la contaminación de los piensos por micotoxinas» según el proceso de autorización de la UE, y todos ellos son productos de Biomin. Aunque otras organizaciones han iniciado el proceso de registro, ninguna ha cumplido con éxito los estrictos requisitos de la EFSA en el momento de redactar este informe. Centrada desde hace tiempo en la investigación de micotoxinas, Biomin ha desarrollado un dinámico departamento de I+D con más de 100 científicos y más de 200 organizaciones de investigación asociadas en todo el mundo, además de sus propios centros de investigación. El enfoque en la investigación de micotoxinas es la razón por la que Biomin es la única empresa con componentes autorizados para la «degradación de micotoxinas». Además de los siete aditivos ya aprobados, se ha presentado para su autorización en la UE una enzima recombinante que biotransforma irreversiblemente la zearalenona en metabolitos no tóxicos. Este compromiso continuo con la ciencia contribuye a garantizar que los agricultores y los fabricantes de piensos dispongan de las herramientas necesarias para contrarrestar con éxito los efectos negativos de las micotoxinas