La sombra para el ganado durante los días cálidos y soleados siempre ha sido importante en todo el mundo, pero con el calentamiento global está siendo aún más importante. Sin embargo, con el aumento del tamaño de las explotaciones y la economía de escala, el número de árboles en los pastos ha disminuido. Parece que sólo estorban a los tractores y cosechadoras, que son cada vez más grandes

Árboles que desaparecen

«Hace medio siglo, los campos de Europa estaban repletos de árboles y zonas de sombra», explica Thomas van Slobbe, coordinador de Trees for Cows, «pero desde entonces se han talado muchos árboles, en parte debido a la concentración parcelaria y a la ampliación

En África, los árboles están desapareciendo como consecuencia de la sequía y del uso de los árboles como combustible».

Planes de plantación de árboles

Pero en los últimos años, los árboles han ganado una nueva y positiva atención por dos razones. Por un lado, los veranos cada vez más calurosos y, por otro, el hecho de que los árboles fijan el_CO2. Esto ha dado lugar a planes de plantación de árboles, ya que éstos proporcionan sombra y reducen la cantidad de gases de efecto invernadero en la atmósfera. Van Slobbe supervisó la plantación de más de 114.000 árboles, plantados a lo largo de los pastos en los Países Bajos desde el año 2000. Van Slobbe: «Esto se hizo con el apoyo de varias organizaciones, desde ecologistas hasta agricultores. Ahora las vacas pueden buscar un lugar fresco a la sombra cuando hace mucho calor. Además, cada año se añaden unos cuantos miles de árboles».

Índice de temperatura y humedad (THI)

Según Van Slobbe, en qué parte del mundo es más acuciante el estrés por calor y en qué grado lo sufren las vacas depende de varios factores: «No es posible comparar el estrés por calor por país. Porque además de la temperatura y la humedad, los animales de alto rendimiento sufren más el calor que las vacas menos productivas, ya que con el esfuerzo para producir, el animal genera calor. Otro factor es que algunas razas de vacas soportan mejor el calor que otras», dice Van Slobbe. Una piel de vaca negra absorbe más calor que una blanca. Y la cuestión de si hay suficiente agua potable disponible, por supuesto también influye.

El sindicato neerlandés de ganaderos LTO desarrolló un Índice de Temperatura y Humedad (THI) en junio de 2020 y, desde entonces, lo ha promovido entre sus interlocutores del sector ganadero. Con el THI, la temperatura y la humedad se combinan hasta alcanzar un valor crítico, un parámetro del estrés térmico experimentado por los animales. Los primeros estudios sobre el THI se realizaron en la década de 1950 en la Universidad estadounidense de Missouri. Con el THI, los ganaderos pueden anticipar mejor los efectos del calor. Van Slobbe: «LTO ha elaborado una serie de consejos y trucos para mitigar el estrés térmico y los ha puesto a disposición de sus interesados. Está claro que algunos de sus consejos pueden aplicarse también en otros países. Por ejemplo, dejar que las vacas paseen por los pastos durante la noche y, si hace demasiado calor, permitir que se queden en los establos frescos».

Razones para plantar árboles

Van Slobbe considera que la plantación de árboles es parte de la solución, y no es el único: «Aquí, en los Países Bajos, tomamos explícitamente la decisión de plantar árboles para dar sombra a las vacas. En muchos otros países esto se hace de forma implícita, como una consideración «lógica», por ejemplo, para hacer el paisaje más agradable, asegurar suficiente leña, fijar el CO2, etc. Para mí es de sentido común plantar árboles».

Las vacas sufren más el calor que los humanos

Según la coordinadora, las vacas se desarrollan mejor a temperaturas de entre -5°C y 15°C. Sufren más con el calor que los humanos y eso se suele subestimar. Los Países Bajos tienen 1,6 millones de vacas lecheras. El año pasado, el 83% de los ganaderos dejaron pastar a sus vacas en el exterior. Van Slobbe: «Desde que el sector ganadero holandés acordó en 2012 fomentar el pastoreo al aire libre, el porcentaje nunca ha sido tan alto como en 2019.»

Las vacas mayores necesitan suficiente sombra

Según Van Slobbe, es especialmente importante que las vacas más viejas tengan suficiente sombra, ya que son más susceptibles al estrés por calor: «Las vacas más viejas sí que sufren más el calor. Las novillas que aún no producen leche son las que menos problemas experimentan. Viendo la tendencia a mantener a las vacas en el exterior, sabemos que no podemos oponernos a ello, aunque tenga sentido mantener a los animales en un establo bien ventilado durante los periodos de calor extremo. En cambio, abogamos por un paisaje favorable a los animales, con suficientes zonas de descanso y sombra».

Utilizar especies autóctonas

Trees for Cows planta principalmente especies arbóreas autóctonas que encajan bien en el paisaje holandés. Van Slobbe: «El trabajo en el lugar se hace a medida. Los árboles y arbustos son de origen autóctono y deben encajar en el paisaje, que difiere en todo nuestro pequeño país. También nos aseguramos de que haya un buen equilibrio entre el número de árboles y el número de vacas por ubicación. Además, la plantación se realiza en los pastos o a lo largo de ellos, de forma que los árboles proporcionen una buena sombra al ganado que pasta» Los tipos de arbustos y árboles ornamentales que se utilizan son diversos, desde el manzano, el sauce amargo, el sauce del bosque y el espino común hasta el manzano silvestre, el cerezo dulce, el roble pedunculado y el aliso negro.

Empezar a plantar árboles a tiempo

Otro punto que hay que tener en cuenta es que hay que tener paciencia a la hora de plantar árboles, según Van Slobbe: «No ofrece una solución inmediata, los árboles necesitan tiempo para crecer y ganar tamaño suficiente. Por lo tanto, los árboles plantados tardarán unos años en ser lo suficientemente grandes como para proporcionar una sombra considerable. Además, los árboles fijan más_CO2 cuando son más grandes. Por eso no se puede empezar a plantar lo suficientemente rápido», concluye el coordinador.