Cuando hablamos de huella de carbono nos referimos a la totalidad de las emisiones de gases de efecto invernadero (dióxido de carbono, metano y óxido nitroso) causadas por un producto expresado en equivalentes de dióxido de carbono (CO2e o CO2eq). Como ya se ha explicado, el 60% de la huella de la producción de carne de cerdo proviene de la alimentación, y esto se debe principalmente a la inclusión de la harina de soja. La soja es una fuente de proteínas esencial en las soluciones de alimentación para la producción de lechones. Sin embargo, aunque en un pienso típico para cerdos, la soja puede ser sólo el 10% de la ración, puede contribuir al 50% de la huella de carbono. Se trata de una cifra que ya no puede ignorarse, ya que la preocupación mundial por el cambio climático es cada vez mayor.

Efecto del cambio de uso del suelo

Es fácil suponer que el impacto de la soja es el resultado de las «millas alimentarias»; sin embargo, lo que influye en esta cifra es el cambio en el uso de la tierra (LUC) atribuido al cultivo de soja producido en Sudamérica. El cambio de uso del suelo puede definirse como la conversión de una categoría de uso del suelo a otra como resultado de la actividad humana. Esto incluye la deforestación, pero también otros cambios, como el paso de pastizales a cultivos, y se revisa en un periodo de 20 años. Es importante señalar que antes de atribuir el LUC a la soja, ésta tiene una huella de carbono muy baja en comparación con otras proteínas, y que la soja cultivada fuera de Sudamérica está relacionada con un cambio de uso de la tierra muy escaso o nulo

Certificados de soja

La reducción de la cantidad de soja en la ración mediante la mejora de la genética, la salud y los regímenes de alimentación reducirá significativamente la huella de carbono de los piensos para cerdos y la carne de cerdo. La reducción del impacto de la soja mediante el abastecimiento de material no LUC, es decir, no sudamericano o mediante el uso de «Certificados de soja sostenible» también proporcionará una reducción significativa. Los certificados de soja sostenible están disponibles en los sistemas de soja regulados que estipulan que no hay cambio de uso de la tierra. Utilizan imágenes de satélite para garantizar que no se ha producido ninguna conversión de la tierra desde 1999 (fuente: Blonk Consulting) y Fefac ha actualizado sus Directrices de Abastecimiento de Soja para 2021 para incluir una sección sobre «transparencia en los enfoques de soja sin conversión en el mercado», como el uso de una determinada calidad de imagen de satélite para el análisis LUC

Ejemplos de emisiones

El cálculo del porcentaje medio de inclusión de soja en las raciones, que es una medida razonablemente rápida y sencilla, puede utilizarse para establecer objetivos que los productores deben cumplir para reducir su huella de emisiones. Por ejemplo, un mezclador doméstico del Reino Unido que utilice raciones de trigo, cebada y soja con una inclusión media de soja del 16,5%, una FCR de destete a finalización de 2,4 y una DW de 85 kg tendrá unas emisiones procedentes únicamente de la soja de 2,66 kgCO2e por kg DW. Si, utilizando proteínas alternativas, la inclusión de soja se reduce al 10% (sin pérdida de rendimiento), las emisiones de la soja serían de 1,70 kgCO2e por kg de peso muerto (DW) (fuente: Premier Nutrition)

Conclusión

En el futuro asistiremos a un aumento de la presión sobre los ecosistemas mundiales. Aunque la soja es una fuente de proteínas esencial para los cerdos, también debemos ser conscientes del impacto medioambiental que tiene la industria de los piensos. Para la mayoría de los proveedores de insumos para piensos, una combinación de iniciativas será el motor del cambio, pero la inversión en los Certificados de Soja Sostenible es una solución muy eficaz y de confianza. Por suerte, cada vez más empresas de nutrición animal son conscientes del impacto sostenible de los piensos y del uso de la soja y han empezado a abastecerse de soja mediante estos certificados