Desde la antigüedad, los humanos hemos utilizado los animales como tecnología básica para convertir la abundante y barata biomasa botánica en alimentos de alto valor nutritivo. Asumir que la gente reducirá su consumo de proteínas de origen animal no es realista, por lo que tenemos que ver cómo podemos hacer que la producción de proteínas animales sea lo más eficiente y sostenible posible.
Si nos fijamos en los alimentos para peces, por ejemplo, el objetivo es reducir la dependencia de la harina de pescado, elaborada a partir de peces salvajes. Esto significa que es necesario disminuir el impacto negativo sobre el medio ambiente y la presión sobre la tierra y el agua por la fabricación de los alimentos para peces. Esto puede hacerse de varias maneras. Una de ellas es el uso de la biotecnología que puede convertir las proteínas de las levaduras o las microalgas. Sin embargo, el proceso de secado de esos procesos biotecnológicos acuosos requiere enormes cantidades de energía. La solución comercial más conocida hasta hoy es no secar sino agregar hasta un 30% de esta «sopa» de materiales húmedos a otras materias primas incluidas en el alimento para peces directamente en la extrusora. No se recomienda añadir más del 30%, ya que esto influiría en la viscosidad de la matriz de alimentación y por lo tanto disminuiría el efecto de cocción. Si esta sopa se añade en las mezcladoras de doble eje, el límite superior es de alrededor del 25% debido a la formación de grumos y el efecto de apelmazamiento.
IsDeCa: Tecnología de mezclado
Para hacer uso de este tipo de nuevos ingredientes, el Centro Noruego de Tecnología de Alimentos ha patentado una nueva tecnología de mezcla llamada IsDeCa, que también incluye un prototipo de la máquina. Este dispositivo puede ser usado para agregar hasta el 65% de los líquidos sin tener un efecto negativo en la homogeneidad o la formación de grumos en la harina de alimento. El contenido final de humedad de dicha pasta antes de la extrusión puede alcanzar el 75%, y sin grumos, pero con un flujo de alimentación óptimo para el preacondicionador de la extrusión. De esta manera, no hay obstáculos para crear un pellet de alimento para peces óptimo y sostenible con un menor uso de agua limpia durante el proceso de extrusión. Añadiendo microalgas y levadura, como materias primas acuosas, se utilizarían menos proteínas vegetales y animales y, por lo tanto, menos tierra cultivable dedicada a la alimentación de los peces. Esto a su vez también reduce las emisiones de gases de efecto invernadero derivadas del proceso de fabricación de los piensos.
Desde el punto de vista de las materias primas, hay empresas incipientes que tratan de utilizar las nuevas soluciones técnicas para desarrollar nutrientes de primera calidad.
- KnipBio-Estados Unidos, por ejemplo, utiliza microbios para convertir la materia prima de baja calidad en un valioso alimento para peces que mejora la pigmentación.
- EcoGea-Eslovenia está usando algas marinas para producir prebióticos.
- Hipromine-Polonia cuenta con una tecnología para producir harina de insectos y al mismo tiempo limitar los desechos a cero y desarrollar proteínas de alto valor para el alimento de los peces y coproductos para la industria de nutrición vegetal y de biopolímeros.
Es bueno ver que la fabricación de piensos para peces está asumiendo su responsabilidad de hacer que los piensos para peces sean más sostenibles.